Los rumores sobre el supuesto uso de Fuerteventura como base para el abastecimiento de submarinos de la Alemania nazi y el descanso de sus tripulantes son falsos y así lo demuestra la documentación existente al respecto, según sostiene el profesor universitario de Historia Juan José Díaz.
Este docente, doctor por la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria, ha llegado a esa conclusión, con la que trata de rebatir una leyenda que persiste desde hace más de medio siglo y que insiste en dar por veraz no poca gente, tras estudiar la documentación de un servicio clandestino de la Armada alemana que se dedicó a abastecer a submarinos alemanes en Canarias durante la Segunda Guerra Mundial.
En esa documentación, en la que "están registradas prácticamente todas las gestiones que hizo ese servicio clandestino" y que se halla repartida actualmente entre archivos de Alemania y Estados Unidos, "no queda constancia, por ningún sitio, de que se hiciera alguna actividad de este tipo en Fuerteventura", ha asegurado a Efe Díaz.
Así se pronunció antes de exponer sus conclusiones sobre el asunto en las XV Jornadas de Estudios sobre Fuerteventura y Lanzarote que se celebran en Puerto del Rosario, en la conferencia "El supuesto abastecimiento de submarinos alemanes en Fuerteventura durante la II Guerra Mundial".
Su intervención se basa en investigaciones que permiten desligar de dichas actividades al ingeniero alemán Gustav Winter, cuya decisión de levantar una gran mansión de arquitectura singular y coronada por una especie de torre en la entonces remota y aún hoy casi desértica playa de Cofete de Fuerteventura fue determinante para que se originara el rumor, sostiene Díaz.
Su inocencia queda aclarada, "concretamente, en dos documentos de julio de 1941 que yo creo que confirman que Gustavo Winter no tenía nada que ver con las actividades de este servicio clandestino en Canarias, y que tampoco se realizó ningún abastecimiento de submarinos en Fuerteventura", ha declarado.
El historiador, que dice que "tiene claro que Winter no estaba relacionado con el servicio clandestino", achaca el surgimiento del rumor, al que se han dedicado escritos y hasta distintos programas televisivos, al "escepticismo" que generó el proyecto del ingeniero de promover la industrialización de la zona de Jandía.
Ese proyecto, planteado entre 1937 y 1938, fue cuestionado por mucha gente por considerarlo "disparatado" para un área entonces casi desértica y despertó la desconfianza de la colonia británica asentada tiempo atrás en Canarias.
Entre ese colectivo, el plan del ingeniero, responsable de la creación de varias centrales eléctricas en España, "generó bastantes recelos, sobre todo en una época en la que las autoridades franquistas estaban propiciando el avance de los intereses económicos alemanes, al mismo tiempo que se mostraban más hostiles hacia los intereses británicos", según Díaz.
"De hecho, la documentación consular británica de entonces recoge precisamente varios rumores relativos a esta actividad, como, por ejemplo, el de que Alemania pensaba comprar las islas de Fuerteventura y Lanzarote, algo que era, realmente, una exageración", ha señalado.
Por todo lo expuesto, ha concluido que la actividad de aquel servicio clandestino alemán, cuya existencia y actividades sí están documentadas en las islas de Gran Canaria y Tenerife entre 1938 y 1944, aunque ya de forma residual a partir de 1942, "es coetánea al proyecto de Winter, pero Winter no tenía nada que ver" con ella. EFE
Fuente: http://www.abc.esEn esa documentación, en la que "están registradas prácticamente todas las gestiones que hizo ese servicio clandestino" y que se halla repartida actualmente entre archivos de Alemania y Estados Unidos, "no queda constancia, por ningún sitio, de que se hiciera alguna actividad de este tipo en Fuerteventura", ha asegurado a Efe Díaz.
Así se pronunció antes de exponer sus conclusiones sobre el asunto en las XV Jornadas de Estudios sobre Fuerteventura y Lanzarote que se celebran en Puerto del Rosario, en la conferencia "El supuesto abastecimiento de submarinos alemanes en Fuerteventura durante la II Guerra Mundial".
Su intervención se basa en investigaciones que permiten desligar de dichas actividades al ingeniero alemán Gustav Winter, cuya decisión de levantar una gran mansión de arquitectura singular y coronada por una especie de torre en la entonces remota y aún hoy casi desértica playa de Cofete de Fuerteventura fue determinante para que se originara el rumor, sostiene Díaz.
Su inocencia queda aclarada, "concretamente, en dos documentos de julio de 1941 que yo creo que confirman que Gustavo Winter no tenía nada que ver con las actividades de este servicio clandestino en Canarias, y que tampoco se realizó ningún abastecimiento de submarinos en Fuerteventura", ha declarado.
El historiador, que dice que "tiene claro que Winter no estaba relacionado con el servicio clandestino", achaca el surgimiento del rumor, al que se han dedicado escritos y hasta distintos programas televisivos, al "escepticismo" que generó el proyecto del ingeniero de promover la industrialización de la zona de Jandía.
Ese proyecto, planteado entre 1937 y 1938, fue cuestionado por mucha gente por considerarlo "disparatado" para un área entonces casi desértica y despertó la desconfianza de la colonia británica asentada tiempo atrás en Canarias.
Entre ese colectivo, el plan del ingeniero, responsable de la creación de varias centrales eléctricas en España, "generó bastantes recelos, sobre todo en una época en la que las autoridades franquistas estaban propiciando el avance de los intereses económicos alemanes, al mismo tiempo que se mostraban más hostiles hacia los intereses británicos", según Díaz.
"De hecho, la documentación consular británica de entonces recoge precisamente varios rumores relativos a esta actividad, como, por ejemplo, el de que Alemania pensaba comprar las islas de Fuerteventura y Lanzarote, algo que era, realmente, una exageración", ha señalado.
Por todo lo expuesto, ha concluido que la actividad de aquel servicio clandestino alemán, cuya existencia y actividades sí están documentadas en las islas de Gran Canaria y Tenerife entre 1938 y 1944, aunque ya de forma residual a partir de 1942, "es coetánea al proyecto de Winter, pero Winter no tenía nada que ver" con ella. EFE