La ceremonia del acto fue presidida por el ministro de Transporte de Dinamarca, Henrik Dam Kristensen, quien detonó los últimos objetos peligrosos que se encontraron durante la operación para la limpieza del terreno.
"La Península de Skallingen tiene un paisaje cambiante, las minas antipersonal fueron colocadas en zonas de dunas móviles y en playas donde el desplazamiento de la arena cambió de manera significativa su posición con el paso del tiempo", explicó el ministro en un comunicado.
Añadió que "además, debido a su valor medioambiental, Skallingen es una zona protegida. Se requirió de una evaluación ambiental exhaustiva y las operaciones de desminado tuvieron que cumplir con las restricciones sobre el uso de vehículos y explosivos, a fin de evitar perturbar colonias de cría de aves raras o en extinción".
Se estima que durante la Segunda Guerra Mundial en Dinamarca se desplegaron 1,4 millones de minas y que la mayoría fueron retiradas entre 1945 y 1947.
Cuando Dinamarca firmó la Convención en 1997, se estimaba que existían todavía unas 300 hectáreas contaminadas y de alto peligro para la población en la península de Skallingen.
Encuestas y revisiones de los antiguos mapas de campos minados redujeron esa área a 186 hectáreas, dividida a su vez en tres zonas, de las que las dos primeras áreas fueron limpiadas entre 2005 y 2008, lo que permitió la restitución de 66 hectáreas de terreno.
El desminado de la última zona tuvo lugar entre julio de 2010 y junio de 2012, cuando se limpiaron las 120 hectáreas restantes.