Murió alemán que guardó más de 1.400 obras de arte robadas por nazis
Publicado: 07 05 2014 02:52
"El octogenario alemán Cornelius Gurlitt, detentor de más de 1.400 obras de arte robadas, varios cientos de ellas a judíos durante el nazismo, falleció el martes, sin que, por el momento, se conozcan los herederos de su "tesoro".
El octogenario alemán Cornelius Gurlitt, detentor de más de 1.400 obras de arte robadas, varios cientos de ellas a judíos durante el nazismo, falleció el martes, sin que, por el momento, se conozcan los herederos de su "tesoro". (Leer Inventario digital de una infamia).
"Cornelius Gurlitt murió en su apartamento de Schwabing (en Múnich, sur), en presencia de su médico y de un enfermero", declaró su portavoz, Stephan Holzinger, en un comunicado.
Después de una difícil operación de corazón, Gurlitt decidió volver a casa para continuar con el tratamiento que se le administraba "día y noche" durante estas últimas semanas, añadió.
Este anciano de 81 años, que vivía aislado en un apartamento de Múnich rodeado de obras maestras de Chagall o Matisse, se hizo célebre en noviembre pasado cuando la prensa reveló la existencia de su "tesoro".
El caso reactivó de forma espectacular la polémica sobre la restitución de las obras robadas por los nazis a judíos durante el Tercer Reich, así como aquellas calificadas de "degeneradas" por los nazis.
En abril pasado, Gurlitt firmó un acuerdo con el estado alemán para restituir las obras provenientes de la expoliación de judíos a sus herederos legales.
La justicia había confiscado a Gurlitt hace dos años obras que pertenecieron a su padre, un marchante de pasado turbio bajo el régimen nazi (1933-45) en el marco de una investigación por fraude fiscal.
Entre las 1.046 obras incautadas entonces, se encontraban lienzos de grandes maestros como Picasso, Cézanne, Renoir y Otto Dix. Los herederos del marchante de arte judío Paul Rosenberg reclamaron la propiedad de una de ellas, en concreto, de la "Mujer sentada" ("Femme assise") de Matisse.
Debió ser una vida muy "interesante" rodeado de tanta obra de arte sabiendo su procedencia.
Noticia completa en El Espectador
El octogenario alemán Cornelius Gurlitt, detentor de más de 1.400 obras de arte robadas, varios cientos de ellas a judíos durante el nazismo, falleció el martes, sin que, por el momento, se conozcan los herederos de su "tesoro". (Leer Inventario digital de una infamia).
"Cornelius Gurlitt murió en su apartamento de Schwabing (en Múnich, sur), en presencia de su médico y de un enfermero", declaró su portavoz, Stephan Holzinger, en un comunicado.
Después de una difícil operación de corazón, Gurlitt decidió volver a casa para continuar con el tratamiento que se le administraba "día y noche" durante estas últimas semanas, añadió.
Este anciano de 81 años, que vivía aislado en un apartamento de Múnich rodeado de obras maestras de Chagall o Matisse, se hizo célebre en noviembre pasado cuando la prensa reveló la existencia de su "tesoro".
El caso reactivó de forma espectacular la polémica sobre la restitución de las obras robadas por los nazis a judíos durante el Tercer Reich, así como aquellas calificadas de "degeneradas" por los nazis.
En abril pasado, Gurlitt firmó un acuerdo con el estado alemán para restituir las obras provenientes de la expoliación de judíos a sus herederos legales.
La justicia había confiscado a Gurlitt hace dos años obras que pertenecieron a su padre, un marchante de pasado turbio bajo el régimen nazi (1933-45) en el marco de una investigación por fraude fiscal.
Entre las 1.046 obras incautadas entonces, se encontraban lienzos de grandes maestros como Picasso, Cézanne, Renoir y Otto Dix. Los herederos del marchante de arte judío Paul Rosenberg reclamaron la propiedad de una de ellas, en concreto, de la "Mujer sentada" ("Femme assise") de Matisse.
Debió ser una vida muy "interesante" rodeado de tanta obra de arte sabiendo su procedencia.
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