"La sala Fundación Caja Vital acoge una muestra retrospectiva del mayor exponente del fotoperiodismo, a través de un centenar de imágenes, dentro del ciclo Periscopio."
Robert Capa fue único en muchas cosas. Entre ellas, viajar en una barcaza el 6 de junio de 1944 junto a las tropas aliadas y desembarcar en la playa de Omaha, en Normandía, con los primeros soldados que llegaban a las costas de Francia bajo el intenso fuego de las tropas de Hitler. Y documentarlo todo con su cámara. Tal vez por ello decía que «si tus fotos no son lo bastante buenas, es que no te has acercado lo suficiente».
Ahora es la oportunidad para el público de la capital alavesa de ver de cerca toda una serie de iconos del fotoperiodismo que documentan la historia del pasado siglo desde 1932 -cuando el joven fotógrafo retrató a Trotsky en Dinamarca- hasta 1954, cuando durante la guerra en Indochina fallecía Capa al pisar una mina antipersonal. Un centenar de fotografías recorre en la sala Fundación Caja Vital de Vitoria la intensa trayectoria del fotógrafo, todo un paradigma del fotoperiodismo y tal vez su mayor exponente.
Recorrió escenarios bélicos como la Guerra Civil española, diversos frentes de la Segunda Guerra Mundial -desde el Norte de África a Italia, pasando por la ofensiva hacia Berlín-, la guerra chino-japonesa o la de Indochina.
Pero el mundo que retrata la cámara de Capa no sólo es conflicto y guerra, ya que también conoció a grandes figuras del arte y el espectáculo, con alguna de las cuales mantuvo amistad. Así, aparecen retratados personajes como el realizador John Huston, el novelista John Steinbeck -que comparte encuadre con el propio Capa-, el periodista y novelista Ernest Hemingway, el autor Truman Capote, la actriz Ingrid Bergman -que fue su pareja durante un tiempo-, el actor Humphrey Bogart o los genios Henri Matisse y Pablo Picasso.
La colección, aportada por la prestigiosa agencia gráfica Magnum -fundada en 1947 junto a otros profesionales de la talla de Henri Cartier-Bresson-, incluye imágenes tomadas en la China de 1938 o en el joven Estado de Israel de finales de los años 40. Todas ellas forman parte de una mirada única en la historia del reporterismo gráfico, que vio la luz como Endre Friedmann en Budapest (Hungría) en 1913.
Montaje complejo
Su ideología, próxima al Partido Comunista, le llevó al exilio en Berlín a los 17 años y, posteriormente, con el ascenso al poder de Hitler, su condición de judío de izquierdas le obligó a huir a París. Fue allí donde su compañera Gerda Taro tuvo la idea de ponerle el nombre que le haría famoso en todo el mundo.
La exposición en Vitoria subraya el trabajo de Robert Capa mediante unas paredes de color granate que realzan el blanco y negro de la fotografías, en una muestra que ha supuesto una laboriosa labor de montaje. Como explica el diseñador de la muestra, Fernando Martínez de Viñaspre, las 96 imágenes de la sala están iluminadas mediante sendos focos.
Tal vez en el próximo Periscopio lleguen las imágenes de la 'maleta mexicana' que actualmente la agencia Magnum clasifica y que podrían ver la luz dentro de «dos o tres meses».
Fuente: El Correo DigitalRobert Capa fue único en muchas cosas. Entre ellas, viajar en una barcaza el 6 de junio de 1944 junto a las tropas aliadas y desembarcar en la playa de Omaha, en Normandía, con los primeros soldados que llegaban a las costas de Francia bajo el intenso fuego de las tropas de Hitler. Y documentarlo todo con su cámara. Tal vez por ello decía que «si tus fotos no son lo bastante buenas, es que no te has acercado lo suficiente».
Ahora es la oportunidad para el público de la capital alavesa de ver de cerca toda una serie de iconos del fotoperiodismo que documentan la historia del pasado siglo desde 1932 -cuando el joven fotógrafo retrató a Trotsky en Dinamarca- hasta 1954, cuando durante la guerra en Indochina fallecía Capa al pisar una mina antipersonal. Un centenar de fotografías recorre en la sala Fundación Caja Vital de Vitoria la intensa trayectoria del fotógrafo, todo un paradigma del fotoperiodismo y tal vez su mayor exponente.
Recorrió escenarios bélicos como la Guerra Civil española, diversos frentes de la Segunda Guerra Mundial -desde el Norte de África a Italia, pasando por la ofensiva hacia Berlín-, la guerra chino-japonesa o la de Indochina.
Pero el mundo que retrata la cámara de Capa no sólo es conflicto y guerra, ya que también conoció a grandes figuras del arte y el espectáculo, con alguna de las cuales mantuvo amistad. Así, aparecen retratados personajes como el realizador John Huston, el novelista John Steinbeck -que comparte encuadre con el propio Capa-, el periodista y novelista Ernest Hemingway, el autor Truman Capote, la actriz Ingrid Bergman -que fue su pareja durante un tiempo-, el actor Humphrey Bogart o los genios Henri Matisse y Pablo Picasso.
La colección, aportada por la prestigiosa agencia gráfica Magnum -fundada en 1947 junto a otros profesionales de la talla de Henri Cartier-Bresson-, incluye imágenes tomadas en la China de 1938 o en el joven Estado de Israel de finales de los años 40. Todas ellas forman parte de una mirada única en la historia del reporterismo gráfico, que vio la luz como Endre Friedmann en Budapest (Hungría) en 1913.
Montaje complejo
Su ideología, próxima al Partido Comunista, le llevó al exilio en Berlín a los 17 años y, posteriormente, con el ascenso al poder de Hitler, su condición de judío de izquierdas le obligó a huir a París. Fue allí donde su compañera Gerda Taro tuvo la idea de ponerle el nombre que le haría famoso en todo el mundo.
La exposición en Vitoria subraya el trabajo de Robert Capa mediante unas paredes de color granate que realzan el blanco y negro de la fotografías, en una muestra que ha supuesto una laboriosa labor de montaje. Como explica el diseñador de la muestra, Fernando Martínez de Viñaspre, las 96 imágenes de la sala están iluminadas mediante sendos focos.
Tal vez en el próximo Periscopio lleguen las imágenes de la 'maleta mexicana' que actualmente la agencia Magnum clasifica y que podrían ver la luz dentro de «dos o tres meses».