Hell Ships
Como la guerra en el Pacífico se desarrolló en un área sumamente extensa, los japoneses se vieron obligados a utilizar buques mercantes para el transporte de prisioneros, operaciones que se realizaron desde 1941 hasta el fin de la guerra en 1945.
A partir del 7 de diciembre de 1941, simultáneamente con el ataque a Pearl Harbor y en las semanas que siguieron, los ataques japoneses en el Pacífico se sucedieron uno tras otro. Cayó Hong Kong, después Malasia y Singapur. En Filipinas, las fuerzas estadounidenses no pudieron contener los ataques japoneses y rápidamente se encontraron cercadas en Bataan sin ninguna posibilidad de mantener las posiciones por mucho tiempo, ni recibir ayuda.
Por orden del Presidente Roosevelt el General Douglas MacArthur tuvo que escapar, dejándole el mando al General Wainwright, prometiéndole una ayuda que nunca llegó. Al final, el 6 de mayo de 1942, Wainwright se rindió al General Homma. En Singapur corrió igual suerte el británico General Percival que rindió la ciudad casi sin oponerse al avasallador ataque del General Yamashita.
Todas esas acciones generaron un enorme número de prisioneros estadounidenses, holandeses y australianos que por razones obvias debían ser trasladados a lugares alejados del sitio donde fueron capturados, muchos de ellos transportados por mar a Japón, Formosa, Manchuria y Corea. Durante los primeros años de guerra en el Pacífico, los japoneses no tuvieron problemas para el transporte de los prisioneros por mar, pero a medida que los submarinos aliados fueron acortando las distancias, la situación para esos buques y en especial para los prisioneros cambió radicalmente.
La fuerza submarina de Estados Unidos tenía órdenes de no recoger supervivientes de los buques japoneses hundidos y esas medidas, tuvieron consecuencias funestas, porque tardaron en darse cuenta que estaban matando a sus propios aliados y también a sus compatriotas.
Las condiciones en que eran transportados los prisioneros, como solía suceder en ambos bandos, era de total hacinamiento.
Los números de baldes para las deposiciones y orina no alcanzaban y a eso se sumaba la gran cantidad de casos de disentería y otras enfermedades infecciosas, la falta de ventilación adecuada, el calor y la cantidad insuficiente de agua potable.
Por otro lado es sabido que para la cultura japonesa de esa época el rendirse era deshonroso para cualquier soldado y por tanto merecedor de todo el desprecio imaginable, por tanto era de esperarse, aunque no por ello justificado, el maltrato y la humillación de los prisioneros. Por esas razones, a los buques japoneses de transporte de prisioneros, los estadounidenses los llamaron Hell Ships (Buques del Infierno). Aunque los hundimientos de los transportes de prisioneros ocurrieron desde 1942, el número aumentó considerablemente en 1943 y en especial en 1944.
De los que se tiene conocimiento, tres buques fueron hundidos en 1942, tres en 1943 y dieciséis en 1944. Pero, los que ocasionaron más pérdidas humanas fueron seis buques hundidos por torpedos aliados en 1944.
El primero fue víctima de un submarino británico, cuatro fueron hundidos por submarinos estadounidenses y uno por aviones embarcados en un portaaviones de EEUU.
Como blanco, esos buques mercantes no eran de mucho valor estratégico, pues se trataba de naves muy antiguas, generalmente lentas y con muy poca capacidad de bodega. Lo que puede llamar a muchos la atención, es que el número de víctimas entre los prisioneros, causados por los submarinos aliados, es mayor que el número de bajas en las peores batallas luchadas en el pacífico, sin embargo nadie recuerda las bajas causadas por los submarinos estadounidenses en la misma medida que lo hacen para los muertos en acción en batallas como Okinawa, Saipan, Iwo Jima y otras, que año a año son recordadas oficialmente en los Estados Unidos.
SS Montevideo Maru

Sin escolta se dirigió a la isla china de Hainan donde fue avistada el 30 de junio por el submarino estadounidense SS Strugeon cerca a la costa norte de Filipinas, aguas afuera de Luzon.
El comandante del Sturgeon disparó 4 torpedos contra el Montevideo Maru, que se hundió muriendo todos los prisioneros que se encontraban en las bodegas de la nave. De todas las 1140 personas que se encontraban a bordo, incluyendo los 88 tripulantes, sólo se reportaron 18 supervivientes, uno de los cuales murió poco después, más 3 prisioneros de los 1053 que fueron embarcados.
SS Lisbon Maru

Poco después el Lisbon Maru se hundió en el océano. De los 1816 prisioneros, 842 murieron ahogados.
Shinyo Maru

Debido al ataque murieron 688 prisioneros. Algunos llegaron a la costa nadando, otros fueron rescatados por barcos japoneses y 81 fueron rescatados por el USS Narwhal.
Rakuyo Maru y Kachidoki Maru


Junyo Maru

A las 15:45 horas el comandante ordena poner la nave en posición de ataque al mercante que navegaba escoltado por dos buques menores.
A las 15:51 ordena disparar 4 torpedos de los cuales dos hicieron blanco.
Luego de escuchar las explosiones ordenó retirarse del lugar por la presencia de las dos naves de escolta. La primera explosión sacudió la proa del Junyo Maru y poco después el segundo impacto de torpedo pegó de lleno contra la popa. Al comenzar a hundirse la popa de la nave el pánico cundió entre los prisioneros encerrados en las bodegas. En pocos minutos la nave se fue a pique arrastrando consigo a todos los que no pudieron subir a cubierta y saltar al agua a tiempo. La corbeta y la cañonera comenzaron e recoger a los náufragos con el peligro de ser atacados por el submarino. Pasada la noche y temprano en la mañana nuevamente regresó la corbeta a recoger más náufragos. Los rescatados fueron 680 prisioneros y 200 trabajadores javaneses. Los prisioneros fueron llevados a Sumatra donde permanecieron hasta el final de la guerra.
Toyofuko Maru
Procedente de Singapur, el Toyofuku Maru transportaba 1200 prisioneros. Había zarpado de su escala en Manila el 15 de setiembre de 1944 integrando un convoy. A los tres días de travesía se tropezó con la Fuerza de Tarea 38 estadounidense al mando del Almirante Marc A. Mitscher. El convoy japonés fue atacado por aviones embarcados hundiendo al Toyofuku Maru. Apenas sobrevivieron menos de 200 prisioneros.
Ural Maru

Arisan Maru

Oryoku Maru

Enuora Maru
El día 25 de diciembre de 1944 los prisioneros del bombardeado Oryoku Maru fueron embarcados en el Enoura Maru y el Brasil Maru. Los barcos llegaron a Formosa el 31 de diciembre y permanecieron en el puerto durante seis días. Los prisioneros del Brasil Maru fueron transferidos al Enoura Maru. El 9 de enero de 1945, el Enoura Maru fue bombardeado y murieron 300 prisioneros, de ellos, 200 murieron por la explosión de una bomba que cayo justo en la bodega de proa donde se encontraban los prisioneros. Finalmente los prisioneros restantes fueron embarcados en el Brasil Maru que se hizo a la mar el día 14 de enero de 1945.
Brasil Maru
