La Segunda Guerra Mundial

En 1926, Portugal vivía una inestable situación de crisis política, incluso de otros aspectos en la vida cotidiana, lo cual llevó al Ejército a efectuar un golpe militar, conocida como la "Revolución Nacional", entregando, seis años más tarde, el poder de la Dictadura a António de Oliveira Salazar (1889-1970), un catedrático universitario y ex seminarista, el cual ya había ejercido como Ministro de Finanzas (desde 1928 a 1932) en el nuevo Gobierno, y aunque sus tesis no habían sido aprobadas, regresó a la política.

Su habilidad para meterse en los entresijos políticos, le llevó a ser proclamado Primer Ministro.

Al frente del Gobierno, inspiró lo que se denominó el Estado Novo: un régimen inspirado de forma suave, en el de Mussolini, un partido único: Unión Nacional, un nacionalismo exacerbado, un poder absoluto alrededor de su persona, terminando todo este proceso como el salazarismo.

La afinidad ideológica con los sublevados del país vecino, y las relaciones diplomáticas no habían sido buenas con el Gobierno republicano de España, le llevó a autorizar la puesta en marcha de una Fuerza Expedicionaria en la Guerra Civil Española (1936-1939): La Legión Portuguesa (en portugués: Legião Portuguesa, abreviado LP), una fuerza paramilitar, iniciándose el 15 de septiembre de 1936, la misma dependía de los Ministerios de Interior y de Defensa, cuya misión era "combatir el patrimonio espiritual" y " combatir el comunismo y el anarquismo".

No hay cifras exactas, pero se calcula que fueron entre 8000 y 12000 (cifra algo exagerada) los voluntarios portugueses que combatieron en España, a los cuales se les llamaba "viriatos" (en honor al líder lusitano, que luchó contra los romanos).

Curiosamente, sí se sabe con exactitud los portugueses que combatieron en las filas republicanas españolas: 500 hombres.

Fundamentalmente, fueron integrados en los Requetés, la Legión y en las milicias falangistas, ya que a pesar del nombre rimbombante, las cifras de voluntarios no permitían que actuara como una fuerza propia. El centro de reclutamiento más importante se instaló en Badajoz, con sucursales en el norte y el sur de Portugal.

El uniforme era en tono gris, tanto la guerrera como el pantalón, llevando unas polainas del mismo color. El correaje de color negro y correspondía a los oficiales. Tanto la camisa como el gorro es de tono azul oscuro. Además llevan un cordón blanco en el brazo izquierdo. En la manga izquierda llevaban también el distintivo propio.

En 1939, terminada la guerra en España, y a la vez comienza la IIGM. Muchos voluntarios portugueses, se quedaron a vivir en España, fundamentalmente cerca de su país, o que habían realizado relaciones con la población española.

El dictador Salazar, el cual se alineaba ideológicamente con las potencias del Eje, ya había asumido personalmente la cartera de AA.EE., tenía la duda de alinearse o no, pero el recuerdo de la IGM., y las tradicionales buenas relaciones con Gran Bretaña(ésta estaba pendiente), le hizo decantarse por la neutralidad, máxime con las colonias de ultramar, sabedor de la potencia de Gran Bretaña en el mar.

En este mismo año, se había realizado un Tratado de Paz y Amistad, llamado El Pacto Ibérico, firmado en 1942, por España y Portugal. El tratado rubricado entre Francisco Franco y António de Oliveira Salazar, que buscaba la no agresión entre ambas naciones, dio nacimiento al llamado Bloque Ibérico.

Esto, tranquilizó a Lisboa, el cual refrendaba la neutralidad de los países peninsulares, ante la sospecha de que España (con el apoyo de Alemania) invadiera Portugal, para tener más acceso al Atlántico.

Permaneció en vigor hasta 1978, año en el que entró en vigor el Tratado de Amistad y Cooperación entre España y Portugal, de 1977.


LA LEGIÓN VERDE

Los portugueses que residían en España, empezaron a enterarse de la oportunidad de marchar a Rusia, en la llamada División Azul, integrada casi en su totalidad, por voluntarios españoles a combatir el comunismo, gracias a la propaganda intensa que la Falange hacía por toda España, al grito de "Rusia es culpable".

El primero voluntario que se apuntó, fue el 1 de julio de 1941. A partir de esta fecha, muchos veteranos portugueses comenzaron a alistarse, en las distintas delegaciones de la Falange, de clara vocación germanófila y anticomunista.

En total, se alistaron 76 "viriatos", un número algo escaso en comparación con los que habían servido en la Legión Portuguesa, aunque la norma era no alistar a nadie por debajo de los 18 años, esto no se cumplió, tampoco ninguno sobrepasaba los 40. E incluso que para alistarse en la División Azul, era requisito indispensable tener la nacionalidad española, esto se omitió.

El nombre que se adoptó dentro de la División Azul, fue el de Legión Verde Portuguesa, el mando mayor era un sargento y 8 cabos.

Se parte para el Frente del Este, en verano de 1941, dirección Leningrado. las primeras escaramuzas se desarrollaron junto al Lago Ladoga, participando en la famosa batalla, después, de Krasni Bor, en los primeros meses de 1943, donde fue hecho prisionero un portugués, José A. Rodrigues Esteves.

En este año, la División Azul fue retirada de Rusia, quedando sólo la Legión Azul española, donde se encuadraron unos pocos portugueses, y posteriormente, a título personal, en las Waffen SS, ya que la mayoría regresó a España y a patria.

* Extracto de una entrevista a un voluntario, de AESFERA, un periódico de la época:

Este chico, moreno y frágil, de 26 años, que tenemos aquí con nosotros, tiene mucho que decirnos y a los suyos.

Se llama João Rodrigues Júnior y ha nacido en Mafra. Pintor de la construcción civil, después de hacer servicio militar, ha partido para España donde había empezado la Guerra Civil, y se ofreció para la "Legión Portuguesa", en el año 1936.

Después de alistado, partió para Melilla, para recibir instrucción de legionario, e incorporado en una bandera del Tercio, entró en la terrible lucha de Teruel, con temperaturas de grados bajo cero, también en la Batalla del Ebro y de Cataluña. Fue herido dos veces, y una de ellas le dejó sin visión por algún tiempo.

Su contrato con la Legión fue por cinco años y estaba terminando. Podría renovar o salir; pero... fue entonces que empezó la guerra contra Rusia. Y yo, que en los años de la guerra de España empecé a comprender lo que son los "bolchevistas", y sus ideas en la Patria, decidí continuar mi vida de legionario, luchando contra ellos. Cuando en España empezaron las inscripciones para la campaña de Rusia, me ofrecí.

¿En la División Azul había otros legionarios portugueses?

Si, unos quince. Pero creo haber sido el único que aún vive.

¿En la División ha habido muchas bajas?

Pues unas seis mil, pero la verdad es que la mayoría de ellas por el frío. Imagine usted lo que es luchar con 35,5 grados bajo cero! João Rodrigues Júnior nos enseña su carnet visado en Berlín. Por el se ve que perteneció a la División española que, en la cruzada contra la Rusia comunista, tenía el nº 250 de división de infantería. Y también que ingresó, herido, en un hospital de campaña alemán.

Cuando la División Azul atravesaba Francia, el tren fue atacado por muchos aviones ingleses que no nos acertaron. Y cuando pasamos en Francia no ocupada, un gran grupo, incluso con algunas mujeres, nos insultan y intentado robar en el tren. Allí estrenamos nuestras armas y algunos civiles cayeron.

Después de la llegada a Alemania, nos fuimos para el frente de Leningrado, donde estuvimos casi un año bajo el comando de un grande militar: el mayor Ramírez de Cartagena. Combatimos sin parar y con mucha violencia. Pero el nuestro peor enemigo era el frío: tanto era que por muchas veces tuvimos que luchar sólo en camisa, bajo temperaturas inaceptables, porque las casacas que nos habían dado quedaban como piedras.

¿Qué piensa usted de la organización de la campaña de Rusia, cuanto a los cuidados con los combatientes?

En eso, como en todo lo demás, yo que estuve en la guerra de España le puedo decir que fue fantástica. Los alemanes organizan las cosas admirablemente, cuanto a comida, municiones, transportes, asistencia a enfermos y heridos, etc.

¿Y los rusos?

Sus ataques son constantes y muy violentos. Pero "aquello" es totalmente diferente de lo que pasa de nuestro lado. Siempre atacan muchísimos, muchas veces con mujeres, viejos y niños muy pequeños, y mueren muchos, porque no utilizan nuestra táctica de caminar con alguna distancia de unos a otros, en pequeños grupos. Los que vimos nosotros, no son buenos militares, no tenían preparación ni organización militar. Le puedo decir, que muchas divisiones rusas fueron hechas prisioneras por grupos nuestros mucho más pequeños, como sucedió en el sector del río Volchov, donde la desproporción entre vencedores y vencidos fue impresionante.

¿Y qué idea le dejaron los rusos?

Horrible. Mala ropa, con hambre, sucios. Las mujeres, en su mayoría, una miseria. Sin siquiera lo que llamamos zapatos, muchos usaban "serapilheira", harapos en los pies!...

!Buen ejemplo de los resultados de la aplicación del régimen comunista!.

"Es verdad. Y bueno sería que fuesen a comprobar, los que quieren saber lo que es la práctica del comunismo."

El otro testimonio, se cita en el diario portugués O INDEPENDIENTE, de fecha 26 de junio de 1.992, en él se realiza una entrevista a Jaime de Assuncâo Graça , ex legionario y también combatiente de la Legión de 1.936-1.939, y ex combatiente de la División Azul, en la citada entrevista contaba con una edad de 79 años.

Cuenta que se enroló en la "Legión Portuguesa", que lo hizo con un grupo de unos 45 portugueses y que se tenía el consentimiento de las autoridades del régimen de Salazar, participó en la guerra y cita lugares, primero fue a Talavera de la Reina, luego Ciudad Real, Cuesta de las Perdices (Madrid, Chamartín, y Villaverde Bajo), siendo herido de metralla y enviado a un hospital a Logroño.[/i]

Las bajas de los portugueses al final del conflicto fueron de 21 (sin confirmar).

El portugués capturado en Krasny Bor estuvo recluido en "gulags" de Siberia y campos de concentración soviéticos, en total 11 años, era conocido entre los prisioneros como "el portugués". Milagrosamente sobrevivió y regresó a España junto con 286 prisioneros de guerra españoles y republicanos disidentes del comunismo el 2 de abril de 1954, en el buque "Semíramis". En Badajoz se reunió con su esposa, una española con la que estaba casado llamada Manuela Jiménez, que había esperado ansiosamente su retorno.

Hubo otro prisionero, pero no hay información de él.

En 1945, las autoridades portuguesas estuvieron pensando en la disolución de la Legión, y dado la pérdida del entusiasmo fascista, ayudó al Gobierno su sumisión, reduciendo su autonomía y subordinándola todavía más al Ejército, además, el saludo en alto fue sustituido por el saludo militar.

Al final fue utilizada como una especie de Guardia Territorial, con la misión de coordinar la defensa civil y su importante Servicio de Información, se convirtió en una especie de auxiliar de la policía secreta (PIDE).

En las décadas de los años 50 y 60, fue estrecha colaboradora con la PIDE, en la vigilancia y represión de las fuerzas de la oposición, en la represión de manifestaciones y de todo lo considerado al Estado Novo.