1. Auschwitz

Se calcula que llegó a albergar a lo largo de cinco años hasta un millón trescientas mil personas, de las cuales murieron un millón cien mil, la gran mayoría de ellas judías, además de eslavos y prisioneros de guerra.
En la puerta de entrada a uno de los diversos campos que componían el complejo (Auschwitz I) se puede leer el lema en alemán Arbeit macht frei «El trabajo os hará libres», con el que recibían a los deportados las fuerzas de las SS que estaban a cargo del centro durante su periodo de funcionamiento, desde su apertura el 20 de mayo de 1940 hasta el 27 de enero de 1945, cuando fue liberado por el ejército soviético.
La placa que desde el fin de la guerra señalaba Auschwitz como «lugar de martirio de cuatro millones de víctimas asesinadas en el genocidio Nazi» fue eliminada tras caer el sistema comunista y sustituida en 1992 por otra que sitúa la cifra de víctimas en «alrededor de un millón y medio de hombres, mujeres y niños, principalmente judíos».
La Unesco lo declaró Patrimonio de la Humanidad en 1979 como uno de los lugares de mayor simbolismo del Holocausto o Shoah.

Algunos campos subordinados al complejo de Mauthausen incluían fábricas de munición, minas, fábricas de armamento y plantas de ensamblaje del avión Me 262. A diferencia de otros campos fue utilizado principalmente para tareas de exterminio de la inteligencia, gente ilustrada y miembros de las clases sociales altas de países subyugados por Alemania durante la Segunda Guerra Mundial.
Muchos españoles que cruzaron la frontera en los últimos meses de la guerra civil fueron detenidos en la Francia ocupada y enviados a Mauthausen. En agosto de 1940 llegaron los primeros hasta completar los 7.300 inscritos en el campo hasta 1945.
En 2003 se inauguró el Centro de Visitantes de Mauthausen

El campo fue construido sobre una fábrica de pólvora en desuso y fue terminado el 21 de marzo de 1933. En Dachau fueron concentrados especialmente religiosos, aristócratas, intelectuales y políticos.
La organización básica, así como los planes de construcción fueron desarrollados por Theodor Eicke, y fueron aplicados para todos los campos posteriores. Eicke se convirtió posteriormente en inspector jefe de todos los campos de concentración, responsable de moldear los otros de acuerdo a su modelo.
En total, más de 200.000 prisioneros de ms de 30 países fueron recluidos en Dachau, el cual a partir de 1941 también fue usado con propósitos de exterminio. Las estadísticas del campo hablan de 30.000 personas asesinadas en el campo.
A comienzos de 1945, se desató una epidemia de tifus en el campo, tras lo cual éste fue evacuado; en esta acción murió gran parte de los prisioneros. Debido al número de muertes, hubo que construir más instalaciones para la cremación, ya que el único horno existente se hizo insuficiente para la gran cantidad de cuerpos. Al mismo tiempo, se le añadió al campo una cámara de gas.
Según datos de la Iglesia Católica, al menos 3.000 religiosos, diáconos, sacerdotes y obispos fueron recluidos allí. Particularmente notables entre los prisioneros cristianos son Karl Leisner, sacerdote católico ordenado mientras estaba prisionero y beatificado por Juan Pablo II en 1996, y Martin Niemöller, teólogo y pastor luterano.
En este mismo campo se ejecutó a Georg Elser quien fue quien perpetró el primero de una serie de Atentados contra Hitler. También acogió Dachau a miembros de la realeza, como la familia real de Baviera (Wittelsbach), la familia de los duques de Hohenberg (hijos del archiduque Francisco Fernando de Austria), el príncipe Javier de Borbón-Parma (líder del carlismo).
En este campo también operó el médico de la Luftwaffe, Sigmund Rascher quien realizó infames experimentos terminales con el objetivo de mejorar la capacidad de supervivencia de los pilotos alemanes en condiciones extremas. Rascher fue ejecutado en el mismo campo por órdenes de Himmler.
Su liberacion
El campo fue liberado el 29 de abril de 1945 por la 45ª División de Infantería del Séptimo Ejército de Estados Unidos. Dachau siguió siendo usado por muchos años después como residencia para refugiados.
Dachau tiene un lugar significativo en la memoria pública porque fue el segundo campo en ser liberado por fuerzas británicas o estadounidenses, y fue uno de los primeros lugares exhibidos a Occidente como prueba de la brutalidad nazi.

Inicialmente fue un solo campo en Mauthausen, pero con el tiempo se expandió hasta convertirse en uno de los complejos de campos de concentración más grande de la zona nazi de Europa. A parte de los cuatro subcampos principales en Mauthausen y la cercana Gusen, más de 50 subcampos, localizados por toda Austria y el sur de Alemania, utilizaron a los ocupantes como esclavos.
Algunos campos subordinados al complejo de Mauthausen incluían fábricas de munición, minas, fábricas de armamento y plantas de ensamblaje del avión Me 262.
En enero de 1945, los campos, dirigidos desde la oficina central en Mauthausen, contenían unos 85.000 prisioneros. Se dice que el numero de victimas es de entre 122.700 y 320.000.
Los campos formaron uno de los primeros campos de concentración masivos en la Alemania nazi, y fueron los últimos en ser liberados por los Aliados Occidentales o la Unión Soviética.
Los dos campos principales, Mauthausen and Gusen I, fueron los dos únicos campos de toda Europa etiquetados como campos de "Grado III", lo que significaba que eran los campos más duros para los "Enemigos Políticos Incorregibles del Reich".
A diferencia de muchos otros campos de concentración, que eran para todo tipo de prisioneros, Mauthausen fue utilizado principalmente para tareas de exterminio de la intelligentsia, gente educada y miembros de las clases sociales altas de países subyugados por Alemania durante la Segunda Guerra Mundial.
Métodos de exterminio
- Trabajo como esclavo en las canteras.
- Cámaras de gas.
- Cámaras de gas móviles: un camión con un tubo de gases dirigido al interior, que iba y venía entre Mauthausen y Gusen.
- Duchas heladas: aproximadamente 3.000 internos murieron de hipotermia debido que eran forzados a quedarse bajo una corriente de agua helada durante varias horas.
- Tiroteos masivos.
- Experimentos médicos.
- Sangrado: varios cientos de internos fueron desangrados hasta la muerte y la sangre extraída fue enviada al Frente del Este.
- Ahorcamiento.
- Hambre. Sólo en el campo de Mauthausen aproximadamente 2.000 prisioneros por semana eran privados de comer hasta la muerte.
- Fusilamientos por las SS.

En total se estima que estuvieron presos unas 250.000 personas procedentes de todos los países de Europa. El número de víctimas se estima en unos 56.000, de los que 11.000 eran judíos.
Buchenwald no era un campo de exterminio industrializado, como los grandes campos de concentración en Polonia. Sin embargo, muchos de los prisioneros fallecieron asesinados o debido a al duro trabajo y a las inhumanas condiciones de vida.
Algunos grupos de prisioneros, como los prisioneros de guerra soviéticos, fueron, no obstante, ejecutados masivamente y conducidos a las instalaciones de fusilamiento.
En la parte exterior de la verja se erigieron unos barracones aislados para prisioneros ilustres, en los que permanecieron, entre otros, Léon Blum, Rudolf Breitscheid, Mafalda de Saboya, Fritz Thyssen o Édouard Daladier.
Experimentos médicos
Se realizaron numerosos experimentos médicos en prisioneros. Muchos de ellos murieron a causa de estos experimentos. Entre otros, fueron infectados con tifus para probar sustancias para vacunas. Asimismo, se realizaron pruebas infectando a los prisioneros con la bacteria de la tuberculosis.
Dado que los prisioneros vivían hacinados en pequeños espacios, algunas de estas enfermedades con las que se experimentaba se extendieron rápidamente y desembocaron en epidemias que no eran tratadas convenientemente por la administración del campo.
Estos experimentos fueron denunciados durante los Juicios de Nuremberg. Entre los acusados figuraba el director del Departamento para la Salud de las Tropas en el Instituto Robert Koch de Berlín, el Dr. Gerhard Rose, por los experimentos con tifus en personas de etnia gitana, así como el Hauptsturmführer de las SS, el Dr. Waldemar Hoven, médico jefe del campo de concentración de Buchenwald.

Comenzó a funcionar el 12 de julio de 1936, cuando las SS transfirieron 50 prisioneros desde el campo de Esterwegen. En una primera fase, el campo de Sachsenhausen fue destinado principalmente a prisioneros políticos, pero desde 1938 fueron llevados allí miles de judíos, desde 1940 miles de polacos y desde 1941 miles de militares soviéticos, 18 mil de los cuales fueron fusilados.
Durante la guerra Sachsenhausen se expandió en un sistema de trabajo forzado en 60 subcampos, concentrados alrededor de las industrias de armamentos, que utilizaba la mano de obra gratuita de los prisioneros. Los presos también fueron sujetos a experimentos médicos.
En enero de 1945 había más de 65 mil prisioneros en Sachsenhausen, incluyendo más de 13 mil mujeres. En este campo de concentración fueron detenidos también varios cientos de exiliados republicanos españoles, entre los que destaca Francisco Largo Caballero.
Antes de su inminente derrota, los nazis ordenaron trasladar a los prisioneros. Las SS dispararon contra todos aquellos incapaces de caminar. Las tropas soviéticas liberaron a los supervivientes el 2 de mayo de 1945, cerca de la ciudad de Schwerin.