La Segunda Guerra Mundial

Gualtier Malde escribió:... El verdadero problema, a mi entender, fue la incapacidad que mostraron los mandos aliados por conseguir un puerto operativo cercano al frente (de hecho lo tenían en la ciudad de Amberes pero con una capacidad muy limítada por no dedicar esfuerzo a la limpieza de estuario) que les hubiera permitido mantener el impulso conseguido con el desembarco y, sobretodo, el mantener la estrategia de frente amplio que tan buen resultado les había reportado hasta entonces.

Has dado en el clavo. Ese gran puerto no se consiguió en toda la ofensiva después de Normandía, tal y como era el deseo de los aliados, ya que los provisionales puertos Mulberry hicieron su función (enorme) pero tenían fecha de caducidad y hacía falta un gran puerto o dos que abastecieran a tan inmenso ejército, como era el aliado. Recordad que las 35 divisiones instaladas en el continente necesitaban más de 20.000 toneladas diarias de suministros para ser operativas. Cherburgo fue tomado a finales de junio, pero los alemanes lo habían destruido, por lo que jamás pudo cumplir su función. No decimos una tontería si afirmamos que el objetivo real del ejército aliado situado al norte, o sea, el británico-canadiense, era la toma de un gran puerto, cosa que no lograron jamás.

Saludos.

Ya vamos llegando.

Desde qué el 4 de septiembre las tropas de Montgomery tomaron el puerto intacto de Amberes hasta que finalizó la llamada Batalla del estuario del Escalda pasaron tres meses. El 28 de noviembre comenzaron a llegar a puerto los convoyes que ya no pararían de atracar hasta la finalización de la contienda, a pesar de los intentos alemanes con el ataque masivo con V-1 y V-2, que no tuvieron repercusión sobre la operatividad del puerto. Otra cosa sería el sufrimiento civíl.

La consecución de la operatividad de este puerto habría sido mucho menos costosa si se hubiera acometido más prontamente la limpieza del estuario, como ya se ha expuesto, el gran error aliado tras el gran éxito de Overlord. Ahora bien, aunque al inicio del ataque sobre la Línea Sigfrido aún no se disponía de este puerto, los suministros provenientes de él comenzaron a hacerse visibles a lo largo de su desarrollo.

Por tanto, la elección de ataques controlados sobre el enemigo poniendo el énfasis en un par de operaciones tenía el doble objetivo de mantener la presión sobre el enemigo para evitar su restructuración y refuerzo, como defendía Eisenhower, y la búsqueda del golpe de suerte que los pusiera a las puertas de Reichstag. Esta decisión estratégica seguro que estuvo motivada en un gran número de hechos -falta de suministros para mantener el avance amplio, dificultad del apoyo aéreo táctico debido a los condicionantes climáticos, replanteamiento tras la prontisima consecución de los objetivos de Overlord-. Ahora bien, encontrándose la guerra en el Pacífico en un momento transcendental y, sobretodo, mientras que el Ejército Rojo realizaba el trabajo sucio en el este, era momento de contemporizar en este frente, puesto que no se ponía en riesgo el resultado final de la guerra.

La elección estratégica de una limpieza en profundidad del Bosque Hürtgen, además, de forma frontal, en vez de buscar golpes, más audaces se encontraban dentro de esta decisión de contemporización manteniendo la presión sobre el enemigo. El resultado fue, sin embargo, nefasto.