Pues yo voy a cambiar un poco la línea de los comentarios.
No estoy muy seguro de que la censura haya servido de nada en este tema. El libro es ya muy conocido, los neonazis (a los que desde luego tengo en muy poca estima, como saben quienes me conocen aquí de largo) ya tienen acceso ilimitado al texto porque llevan décadas pasándoselo de mano en mano.
Prohibir contribuye a mitificar y crear una cierta expectativa. Lo saben muy bien quienes vivieron en las últimas décadas de la España franquista, pues había libros censurados que, sin embargo, eran leídos con avidez y pasaban de mano en mano, a pesar de que muchos de ellos eran bastante inocentes.
Para rematar la faena, como se ha demostrado muchas veces, hoy día censurar es inviable. Con internet cualquiera puede tener acceso a lo que le de la gana en cuestión de minutos. Podéis probar, si queréis, cuánto tardáis en haceros con una copia del texto. Os aseguro que no más de 10 minutos.
Con esto quiero decir que creo que en Alemania se lo han pensado muy bien y han optado por la mejor solución. Que el libro circule, que se lea en ediciones con estudio histórico y que, por lo menos, cuando caiga en manos de alguien desinformado y de buena fe, haya un texto al lado que explique las tonterías del texto. Hasta ahora, el libro circula en textos sin estudio histórico, así que si cae en manos inocentes cualquiera puede verse intoxicado por las barbaridades de Hitler.
albertoa escribió:Este periodista de La Ser debería tener en cuenta que hablar de Hitler utilizando el término "Führer" es muy propio de filonazis y simpatizantes del sanguinario dictador. Estos becarios...
Voy a romper una lanza por los periodistas, por una vez, pues ya sabéis que soy muy crítico con su trabajo.
Lo que hace el periodista es usar el libro de estilo, que indica que no se debe reiterar una palabra. De esta forma, para evitar reiteraciones, se usa
Führer para no repetir Hitler,
Duce para no repetir Mussolini,
Caudillo para no repetir Franco, etc.
No sólo es correcto sino que es recomendable. Se considera un error grave reiterar las palabras de uso común. El problema, en estos casos, es que si hablas sobre Hitler, acabarás diciendo "Hitler" muchas veces, por lo que tienes que hacerte una lista de sinónimos para ir alternando, a saber: "el dictador", "el dictador alemán"... Y como no hay muchas opciones, al final se usa "Führer" porque no te queda más remedio, ya que decir "Adolf" suena un poco ridículo en un texto que pretende ser serio.
Saludos