Un tanque KV-1 (Klim Voroshílov) que se hundió en el río Neva en los tiempos de la II Guerra Mundial fue recuperado recientemente en una zona conocida como Nevski Piatachok, a 50 kilómetros al sureste de San Petersburgo y escenario de los combates más cruentos durante el sitio de Leningrado.
Las labores para recuperar el carro se vieron difucultadas por condiciones meteorológicas adversas. Además, la profundidad del río alcanza los 15 metros en esa zona.
Pese a estas condiciones desfavorables, la operación fue concluida con éxito el pasado martes. El tanque recuperado será expuesto en un museo.
Los efectivos del Ministerio de Situaciones de Emergencia que participaron en las labores sacaron del tanque restos de municiones. Mientras tanto, no se encontraron restos humanos en su interior, lo que quiere decir que los tripulantes pudieron abandonar el carro antes de que se hundiera.
Todo apunta a que el tanque se hundió cuando intentaba cruzar el río sobre un pontón rumbo a la zona de combates. La identificación de la matrícula del KV-1 recuperado permitirá a los investigadores conocer la suerte que corrieron sus tripulantes e incluso buscar a sus familiares y allegados.
Tras ser trasladado a los talleres del museo “La Batalla de Leningrado”, el tanque será sometido a obras de restauración. Según lo previsto, se quedará en la provincia de Leningrado y participará en desfiles militares y reconstrucciones históricas.
Seguro que lo dejan como nuevo. Aunque no está muy mal, no hace mucho sacaron de una laguna un T-34 como si se hubiera hundido un par de días antes, creo que fue en algún lugar de Polonia.
Imponente. Está como nuevo para los años que ha pasado por ahí abajo.
Está claro que se pensaban para ser robustos y duraderos. He visto algún Sherman rescatado de Normandía y no están, para nada, tan bien como este KV-1, aunque también es muy diferente el mar que un río, por caudaloso que sea el Neva.
Gracias por acercarnos la noticia kamerad Mariscal Panzer.
Han pasado casi 70 años y en verdad que el KV 1 se encuentra en un estado de conservación bastante aceptable.
Otra pieza histórica para los museos.
Mariscal Panzer escribió:...no se encontraron restos humanos en su interior, lo que quiere decir que los tripulantes pudieron abandonar el carro antes de que se hundiera