Rommel, el Zorro del Desierto
Cartel de "Rommel, el Zorro del Desierto"

Ficha
TÍTULO ORIGINAL: The Desert Fox: The Story of Rommel
AÑO: 1951
DURACIÓN: 85 min.
PAÍS: EEUU.
DIRECTOR: Henry Hathaway
GUIÓN: Nunnally Johnson (a partir de una historia de Desmond Young)
MÚSICA: Daniele Amfitheatrof
FOTOGRAFÍA: Norbert Brodine
REPARTO: James Mason, Cedric Hardwicke, Jessica Tandy, Luther Adler, Everett Sloane, Leo G. Carrol
PRODUCTORA: 20th Century Fox
Sinopsis
El 23 de octubre de 1941 las fuerzas británicas están a la puerta del Alamein. El Mariscal Erwin Rommel, comandante en jefe de las tropas alemanas, ordena la retirada a pesar de que Hitler le había dado la consigna de Victoria o muerte. Tras ser relevado de su cargo, Rommel vuelve a Alemania para hacerse cargo de la defensa costera contra una previsible invasión aliada. Sin embargo, se da cuenta de que Alemania no va por buen camino, y un amigo suyo, el Doctor Karl Strolin, le convencerá para formar parte de un complot para asesinar a Hitler.
De todas las versiones cinematográficas sobre la figura del Mariscal Rommel, esta destaca por la prodigiosa interpretación de James Mason (Con la muerte en los talones) que parecía haber nacido para interpretar al personaje. Junto a él Jessica Tandy (Los pájaros). La dirección recayó en el maestro Henry Hathaway (El beso de la muerte).
Fuentes:
http://www.decine21.com
http://www.filmaffinity.com
http://www.fox.es
Desde luego, no es la película que Rommel merece.
El siempre brillante James Mason hace un excelente trabajo en una producción de perfil bajo, donde se ven importantes lagunas narrativas que parece provocadas por la falta de capital para abordar mejores escenas o ambientaciones. Algunas secuencias, como el intento de asesinar a Rommel por parte de grupos de operaciones especiales británicos al inicio de la cinta (Operación Flipper), son de lo peor de la historia del cine de la Segunda Guerra Mundial.
A los fans del DAK les decepcionará no ver una sola escena decente de Rommel en el Norte de África pues, de hecho, la película, curiosamente, apenas habla de su carrera militar. Sin embargo, lo peor es un guión simplista, demasiado preocupado en justificar y "salvar" a Rommel a partir de su participación en el complot de asesinato de Hitler. La guerra apenas había terminado cuando se rodó este film, que tenía como objetivo claro el ofrecer una imagen positiva del Mariscal para el público Aliado. Lo más curioso de la película es que el cine norteamericano dedicó este biopic a un general alemán, antes que a ningún militar propio.
Digno de todo elogio, sin embargo, además de Mason, es la breve aparición del personaje de Gerd von Rundstedt, perfectamente perfilado, en una de sus mejores versiones en pantalla.