El emperador de Japón, Hirohito, sabedor de la valía de determinados militares alemanes, otorgó tres espadas samuráis a sólo tres militares, en la Segunda Guerra Mundial.
Erwin Rommel
(No hay fotografía de la entrega ni de la misma, y la espada está en propiedad de la familia)
Bernhard Rogge
La segunda fue para este capitán de la Marina de Guerra, por su singladura al mando del buque corsario HSK Atlantis, se conserva en el Museo Naval de Hamburgo. (foto abajo)
Espada japonesa enviada al capitán Bernhard Rogge
Herman Göring
Y la tercera, para el Mariscal del Reich, no hay fotografía de la misma ni de su entrega, se especula que pueda estar en algún museo estadounidense privado, tampoco se sabe el motivo de su concesión.
Foto y fuente.
El sudor ahorra sangre, la sangre ahorra vidas, y el cerebro, las dos cosas. (Erwin Rommel)