Un panzergrenadier del Afrika Korps con gafas y pañuelo para protegerse del viento y la arena
El Primer Ministro británico, Winston Churchill junto a los generales sir Harold Alexander (izquierda) y Bernard Montgomery (derecha) en Egipto. Agosto 1942
General Alec Gatehouse, comandante de la 10th Armoured Division sobre un Crusader
Oficial británico inspeccionando el frente sobre su vehículo blindado Marmon Herrington
El 5th Panzer Regiment acaparando suministros
Con la llegada al desierto del tanque Grant, los británicos pudieron ofrecer un serio oponente a los Panzer III y IV
Infantería italiana con el un cañón antitanque 47/32 M35
En el centro el Teniente General sir Bernard Montgomery. Junto a él dos de sus jefes de cuerpo, a la izquierda Oliver Leese (XXX cuerpo) y Herbert Lumsden (X cuerpo)
El "zorro del desierto", Generalfeldmarschall Erwin Rommel, comandante en jefe del Panzerarmee Afrika
Tres mariscales discutiendo la situación en Egipto. A la izquierda Rommel, en el centro Albert Kesselring y la derecha el italiano Ugo Cavallero
Rommel visitando el Cuartel General del Afrika Korps. De izquierda a derecha, el coronel Fritz Bayerlein, teniente coronel Mellenthin, Rommel y el general Walther Nehring
Antitanque británico 6-pdr. Sus proyectiles podían penetrar un blindaje de 50 mm a una distancia de 1500 metros
Tanque ligero Stuart en las filas de la 7th Armoured Division en las proximidades de Qaret el Himeimat
Los primeros Sherman en el desierto africano. Llegaron justo a tiempo del comienzo de la ofensiva británica en El Alamein
Un Panzer III capturado
Un SdKfz arrastrando a el temido Flak de 88 mm
Rommel inspeccionando un tanque ligero Stuart puesto fuera de combate
Artillería italiana de 149 mm, modelo 149/40
Tropas de la 1st South African Division junto a un blindado Marmon Herrington
Panzer IV del 8th Panzer Regiment
Motociclistas de la Luftwaffe totalmente exhaustos
Un Panzer III del la 21st Panzer Division protegiendo una columna de vehículos en la línea de El Alamein
Batería de 88 mm en la línea del frente
Una patrulla británica intercepta un camión enemigo capturando a sus ocupantes
Tropas italianas colocando minas en sus posiciones avanzadas
Un antitanque soviético de 75 mm usado por los alemanes en el desierto
Un Panzer III puesto fuera de combate en Alam Halfa
Tropas británicas inspeccionando vehículos enemigos puestos fuera de combate después de la batalla de Alam Halfa
Un cámara británico mirando dentro de un tanque italiano M13/40 puesto fuera de combate
Un equipo italiano de señales reparando un cable de comunicaciones
Autopropulsado italiano Semovente 75/18 de 75 mm
Fuego de artillería británica previo al comienzo de la Operación Lightfoot
Infantería británica en el frente
Artillería británica abriendo fuego en la noche del desierto
Montgomery posando en su tanque Grant
Un tanque Crusader pasa junto a un Panzer IV puesto fuera de combate en los últimos momentos de la batalla
Columna de prisioneros alemanes e italianos capturados en El Alamein
Cementerio militar de la Commonwealth en El Alamein
Fuentes: El Alamein. The turning of the tide. Ken Ford
Abro cuestión: El semovente italiano, tiene unas características muy interesantes, tanto en calibre de cañón como en blindaje. Saben si realmente fue útil en áfrica, ¿O eran demasiado escaso su número? ¡Opiniones!
¿Más útil como artillería autopropulsada o como cazacarros autopropulsado? Recalcar también que pensaba que no tenía ametralladora, aunque en wikipedia aparecen dos modelos distintos, la breda de 8mm o de 6,5mm. No veo ninguna ametralladora en ninguna fotografía.
Hauptmann escribió:
Abro cuestión: El semovente italiano, tiene unas características muy interesantes, tanto en calibre de cañón como en blindaje. Saben si realmente fue útil en áfrica, ¿O eran demasiado escaso su número? ¡Opiniones!
¿Más útil como artillería autopropulsada o como cazacarros autopropulsado?
En África, cualquier cosa era útil, porque los suministros eran escasos. Prácticamente todo lo que tuviese motor servía para algo, fuese o no un ejemplo de ingeniería militar.
Discrepo en la valoración del blindaje. Como en general con los vehículos italianos. No se trata sólo del grosor, sino también de la disposición y diseño, con demasiados planos débiles que eran blancos fáciles. Además, las corazas remachadas tampoco eran lo ideal, pues cada junta remachada es un punto débil en comparación con los cascos de cuerpo único.
Para su uso de artillería adolecía de un grave problema: su escasa capacidad de estiba. Podía cargar muy poca munición, lo cual es una merma muy importante en cualquier tipo de autopropulsado.