CHETNIKS – LA GUERRILLA SERBIA
- INTRODUCCIÓN
- ORÍGENES
- LA SEGUNDA GUERRA MUNDIAL
- COMPOSICIÓN
- COLABORACIÓN CON EL EJE
- TERROR Y LIMPIEZA ÉTNICA
- LA PÉRDIDA DEL APOYO ALIADO
- COLABORACIÓN CON LOS SOVIÉTICOS
- RETIRADA Y DISOLUCIÓN
- GALERÍA DE IMÁGENES
- FUENTES
Bandera de las Unidades Chetniks. El lema "Por el Rey y la Patria. Libertad o Muerte"1. Introducción
Los Destacamentos Chetnik del Ejército de Yugoslavia, comúnmente conocidos como los Chetniks, fue un movimiento guerrillero en la antigua Yugoslavia que estuvo liderado por el General Draza Mihailovic, que se alzó contra la ocupación de las fuerzas del Eje como objetivo a largo plazo, aunque también llegó a colaborar con las fuerzas de ocupación por periodos limitados y en cuestiones tácticas.
El General Draza Mihailovic, fue el líder máximo de todas las Unidades Chetnik
Los Chetniks no eran un movimiento homogéneo. En algunos territorios adoptaron una política de colaboración con el beneplácito del Eje y actuaron como fuerzas auxiliares, en otros sirvieron a los propósitos del Gobierno de Salvación Nacional de Milan Nedic, y en menor medida colaboraron con los partisanos de Josif Broz, Tito, como fuerza de resistencia a la ocupación. También en otros territorios como Dalmacia ó Montenegro, colaboraron con las fuerzas de ocupación italianas, e incluso en algunos casos con la Ustacha croata, y después de la capitulación de estos, en septiembre de 1943, directamente con las fuerzas de la Alemania nazi.Fue a raíz de la extensión y la importancia de estas políticas de colaboración de manera extensiva y sistemática, cuando los Chetniks empiezan a referirse ellas como “utilización del enemigo”, para conseguir el objetivo de volver a la construcción de la Gran Serbia y del retorno del Rey Pedro II de Yugoslavia que se encontraba en el exilio.
Las relaciones de colaboración entre Chetniks y alemanes fueron fluidas y de colaboración en la mayoría de ocasiones
Como consecuencia de estas políticas de colaboración, los Chetniks formaron parte de las acciones criminales de las fuerzas de ocupación nazi en los territorios de Yugoslavia. Utilizaron el terror contra los croatas en las zonas de Serbia en las que cohabitaban ambas etnias, contra la población musulmana en Bosnia y Herzegovina, y contra los partisanos de Tito en aquellas áreas en las que luchaban por la hegemonía territorial. El asesinato de civiles, la quema y saqueo de poblados y aldeas, y los juicios sumarísimos a los milicianos de los movimientos de resistencia, fueron parte de las actuaciones de los Chetniks en esos territorios.
Las tensiones étnicas existían desde hacía muchísimos años en los diferentes territorios del Reino de Yugoslavia. Por eso los Chetniks, en particular Draza Mihailovic tal y como expone en su Directiva del 20 de 1941, entienden estas acciones contra croatas y bosnios, como parte de la guerra para conseguir el objetivo de la Gran Serbia y conseguir así “despejar” esos territorios de la población que no fuera serbia. La lucha contra los partisanos, en cambio, se mantenía en un plano puramente ideológico y las acciones contra los musulmanes se enraizaban en los ancestrales conflictos entre ambas etnias de carácter religioso.
2. Orígenes
Aunque más tarde la organización se renombró como Ejército del Territorio de Yugoslavia, el nombre que se siguió utilizando fue el popular Chetniks. La palabra Chetnik se utilizaba para describir a los miembros de la Guerrilla Balcánica Cheta, compuesta por cristianos ortodoxos serbios y búlgaros, que lucharon contra los turcos del Imperio Otomano a principios del siglo XX en las guerras balcánicas. Es una palabra eslava, cheta, que significa “grupo organizado o banda”, y que a su vez deriva de otra turca “cete” tomada a su vez del sánscrito “cakra” y que significa “grupo de soldados”. El sufijo “nik”, de origen eslavo, significa a su vez, “el que tiene relación con algo”. Por lo tanto un Chetnik, sería aquella persona que tiene relación ó se encuentra encuadrada en un grupo organizado o banda.
Aunque el movimiento Chetnik tiene su raíces en el siglo XIX en los movimientos de resistencia contra los turcos en Serbia, la primera organización operativa de la que se tiene conocimiento data del año 1903, cuando el ejército serbio crea e implementa un programa para la instrucción de los individuos y poder así desarrollar una estrategia de guerra de guerrillas y acciones terroristas en Macedonia contra los turcos. En esta organización primigenia, ya figuraban guerrilleros como Ilia Trifunovic Bircanin o Kosta Pecanac, quién se encontraba al frente de la organización Chetnik, (Asociación Chetnik por la Libertad, el Honor y la Madre Patria), en abril de 1941 al inicio de la invasión alemana. La organización Chetnik combatió en las dos guerras balcánicas, (entre 1912 y 1913, contra turcos y búlgaros), y en la Primera Guerra Mundial, manteniéndose activos también durante el periodo de entreguerras.
Veteranos Chetniks desfilando por las calles de Belgrado en 1920
A lo largo de esos periodos, Kosta Pecanac había establecido fuertes lazos con la ultraderecha yugoslava encabezada por Milan Stojadinovic, quien era partidario de establecer relaciones diplomáticas con la Alemania nazi Hitler y con la Italia fascista de Mussolini. Eso llevó a Ilia Trifunovic a escindirse de la organización creando la “Asociación de Antiguos Chetniks” como organización rival a la de Pecanac aunque nunca llegaron a enfrentarse seriamente.
Kosta Pecanac, líder Chetnik desde las Guerras Balcánicas, estaba al frente de la mayor organización Chetnik en 1941 y además tenía lazos con la ultraderecha yugoslava
3. La Segunda Guerra Mundial
En Abril de 1941 tropas alemanas, italianas y húngaras, invaden Yugoslavia llevando al colapso al estado Yugoslavo, forzando el exilio a Inglaterra del Rey Pedro II y provocando la rendición del ejército yugoslavo. Varios destacamentos serbios se negaron a acatar las órdenes de rendición y se desplazaron a zonas montañosas para iniciar un movimiento de resistencia contra la invasión, de tal manera que el movimiento de resistencia Chetnik es anterior a los Partisanos de Tito.
Pecanac llegó pronto a una serie de acuerdos con el Gobierno de Salvación Nacional de Nedic, en el Territorio del Comandante Militar de Serbia que en esa época era Helmuth Förster.
Kosta Pecanac paseando del brazo de un Oficial alemán en ocubre de 1941
Por otro lado el entonces Coronel Draza Mihailovic comienza un movimiento de resistencia contra los invasores, y establece el Cuartel General de su organización en la localidad de Ravna Gora, en lo que más tarde sería conocido como el “Movimiento Chetnik de RavnaGora”, para poder distinguir así su organización de los Chetniks de Pecanac y de otros grupúsculos que empezaban a colaborar con los alemanes. De esta manera, y dado que esas otras organizaciones empezaron a actuar en la órbita de las fuerzas de ocupación, la palabra Chetnik quedó ligada casi en exclusiva a la organización liderada por Mihailovic. Es por lo tanto que la palabra Chetniks en la Segunda Guerra Mundial se utiliza para referirse casi en exclusiva al “Movimiento Ravna Gora” de Mihailovic, aunque otras organizaciones como las lideradas por Kosta Pecanac, Dimitre Ljotic o Ilia Trifunovic tuvieran el mismo origen común en el movimiento Chetnik de la preguerra.
Ilia Trifunovic Bircanin, también era otro destacado líder Chetnik. Aquí le vemos en 1942 dirigiéndose a una de las facciones bajo su control
En junio de 1941, ya en los albores de la Operación Barbarroja, los Partisanos Comunistas liderados por Tito protagonizan un alzamiento contra las tropas de ocupación y es en esos primeros momentos cuando se da entre los Chetniks y los Partisanos una colaboración más estrecha contra las fuerzas del Eje.
Para el verano de 1941, el “Movimiento Ravna Gora” ya había atraído hacia sí a un cierto número de intelectuales y de políticos serbios, como Stevan Moljevic, que empezaban a desarrollar una ideología propia, tanto para el Movimiento como para la futura Gran Serbia, instando a las fuerzas Chetniks a no cometer los errores de la Primera Guerra Mundial y que reclamasen los territorios históricos de Serbia que según Moljevic abarcaban entre un 65% y un 70% del Reino de Yugoslavia. Además empezaban a propugnar la relocalización en otros territorios de la población que no fuera serbia de origen. Mihalovic designó en Agosto de 1941 a Moljevic como líder del Comité Nacional Central del Movimiento Ravna Gora, de tal manera que sus propuestas fueron trasladadas al Comité Chetnik de Belgrado y más tarde, en Septiembre de 1941, al Gobierno en el exilio del Rey Pedro II, detallando ya de forma específica los intercambios de población entre los diferentes territorios del Reino de Yugoslavia.
El Rey Pedro II, desde el exilio en Londres, estaba puntualmente informado de las bases políticas del Movimiento Ravna Gora. En la foto aparece con el General Montgomery y con Winston Churchill
En marzo de 1942, la División Chetnik de Dinara propuso la creación de una Gran Serbia que comprendía un corredor entre Herzegovina, la Dalmacia septentrional, Bosnia y desde Lika a Eslovenia, vaciando esas áreas de población que no fuera serbia de origen. Los líderes militares de esas zonas aceptaron el plan y se firmó un documento de estrategia que establecía la colaboración con las fuerzas italianas como modo de vida y la formación de Unidades Chetnik Croatas para luchar contra los Partisanos, la Ustacha y los Domobranci eslovenos. Además se establecía la propuesta de un tratamiento digno y decente para la población musulmana, (con el fin asimismo de evitar su adhesión al movimiento partisano), y la posibilidad de un pacto postrero con los bosnios.
En el otoño de 1942 otro documento es presentado en la Conferencia de Jóvenes Intelectuales Chetniks en Montenegro, y propone además que la futura Yugoslavia unificada estuviera únicamente compuesta por serbios, croatas y eslovenos, con la exclusión de otros grupos étnicos, que sería controlada por las fuerzas Chetniks con el respaldo del Rey, además de reformas políticas y agrarias, nacionalización de la banca y el comercio, y promoción de la ideología Chetnik como la fundamental del Estado. A pesar de la ausencia de Mihailovic, se daba por supuesta su adhesión al documento, ya que envió a la conferencia a tres de sus principales lugartenientes en el Destacamento Chetnik de Lim-Sandzak, (el mayor y más elitista en esa época), tales como Ostojic, Lasic y Durisic, siendo este último uno de los que desempeñó un papel predominante en la conferencia.
Pavle Durisic, Comandante Chetnik en la zona de Sandzak
A finales de 1942 ve la luz un manual preparado por los líderes militares Chetnik, el cual detalla un plan en tres fases y una estructura militar para ser puestos en marcha durante la Guerra. El manual argumentaba que ambos pueblos, (serbios y croatas), habían sido maltratados por los diferentes gobiernos del periodo de entreguerras y que existía un sentimiento de rechazo entre los croatas, especialmente en Belgrado, contra las políticas de esos gobiernos. A excepción de la Ustacha, los croatas no eran percibidos como enemigos del pueblo serbio y se fijaba el objetivo de incorporar a las fuerzas de resistencia croatas bajo mando de los líderes Chetnik. Aquellos que mostrasen lealtad a la Ustacha serían sumariamente ejecutados. Las cuestiones de las relocalizaciones y las conversiones religiosas, serían dejadas de lado en un primer momento, hasta que los serbios se hicieran con el poder en Yugoslavia. Lejos de ser un documento que promoviera la reconciliación, la venganza quedaba incorporada y explicitada en el documento como “un deber sagrado del Pueblo Serbio, contra aquellos que se hubieran manifestado como enemigos durante la Guerra y la Ocupación”.
Al principio de la Guerra algunos líderes Chetnik llevaron a cabo varias operaciones contra las fuerzas del Eje en coordinación y colaboración con los Partisanos de Tito. El 19 de septiembre de 1941, Tito y Mihailovic se reúnen por primera vez en la localidad de Struganik. En esa reunión Tito le ofrece a Mihailovic convertirse en su Jefe de Estado Mayor a cambio de integrar las unidades Chetniks con sus Partisanos. Mihailovic era reacio a atacar abiertamente a los alemanes, ya que temía las represalias contra la población civil, (por cada soldado alemán muerto 100 civiles serían fusilados. Por cada soldado alemán muerto, 50 civiles serían fusilados), por lo que rechazó el ofrecimiento de Tito, aunque prometió no atacar ni hostigar a los Partisanos. El 26 de octubre de 1941, Tito propone a Mihailovic un nuevo acuerdo basado en doce puntos tales como el establecimiento de un Cuartel General conjunto de Partisanos y Chetniks, acciones militares conjuntas contra los alemanes y otras unidades colaboracionistas o de ocupación, la creación de un Estado Mayor Conjunto para temas de abastecimiento y suministros, y la formación de Comités de Liberación Nacional. Mihailovic volvió a rechazar la propuesta y empezó a pensar que al mismo nivel que los alemanes, los Partisanos de Tito empezaban a ser sus enemigos.
Soldados Chetniks golpean con palos a un Partisano capturado
Esos pensamientos de Mihailovic son llevados a la acción el 2 de noviembre de 1941 cuando sus unidades Chetniks atacan el Cuartel General de los Partisanos en Uzice. El ataque fue rechazado y se produjo un posterior contraataque de los Partisanos al día siguiente. Los Chetniks perdieron en torno a los 1000 hombres entre ambas acciones, además de una considerable cantidad de armamento. Tras sucesivas escaramuzas durante las dos semanas siguientes, el 18 de noviembre Mihailovic acepta el ofrecimiento de tregua de Tito a pesar seguir pensando que la colaboración entre ambas unidades no era posible.
Durante ese mes, y a instancias del Gobierno en el exilio, los británicos insistieron varias veces a Tito para que nombrase a Mihailovic como Comandante en Jefe de todas las fuerzas de resistencia, siendo tal petición rechazada por Tito. Además se produjeron varias violaciones de la tregua por parte de los Chetniks, a instancias del Estado Mayor de Mihailovic, como la ejecución de un Comandante Partisano ó la masacre de unos 30 civiles acusados de colaborar con los Partisanos, (la mayoría eran niños y heridos). A pesar de ello, los Chetniks y los Partisanos siguieron llevando a cabo acciones conjuntas puntuales en la zona oriental de Bosnia.
En diciembre de 1941, el Gobierno en el exilio en Londres decide el ascenso de Draza Mihailovic a General de Brigada y le designa como Comandante en Jefe del Ejército Nacional de Yugoslavia. Para esa época Mihailovic había empezado a establecer lazos con el Gobierno de Salvación Nacional de Milan Nedic y con los alemanes, a cambio de que le proporcionaran armamento para poder luchar contra los Partisanos de Tito. Estas conversaciones se vieron frustradas por el convencimiento del General Franz Böhme, Comandante General Plenipotenciario en los Balcanes, quien creía que podían combatir a los Partisanos con sus propios medios y que además le exigió a Mihailovic su rendición incondicional. Los alemanes lanzaron una ofensiva contra los Chetniks de Mihailovic en Ravna Gora, quienes se vieron obligados a retirarse del Territorio del Comandante Militar de Serbia, desplazando el núcleo de sus tropas y el escenario de sus operaciones al Estado Independiente de Croacia, (títere de los nazis), gobernado por Ante Pavelic.
El General Franz Böhme rechazó la oferta del General Mihailovic para luchar contra los Partisanos de Tito
En esa época los aliados empiezan a sopesar una invasión de los Balcanes, debido al peso estratégico que empezaba a tener ese teatro de operaciones con sus movimientos de resistencia. Para ello debían obtener información de primera mano sobre cuáles eran las acciones que llevaban a cabo ambas facciones contra las fuerzas del Eje. Para ello se mandaron a la zona a varios Oficiales del Ejecutivo de Operaciones Especiales, SOE, británicos y algunos de la Oficina de Servicios Estratégicos, OSS, estadounidenses.
El Coronel Bailey del SOE británico posando con el Comandante Lukacevic del Movimiento Ravna Gora
Los alemanes, que tampoco eran ignorantes de la importancia adquirida por esos movimientos de resistencia, deciden “barrer” a las tropas de Partisanos con una serie de ofensivas contra ellos esta vez sí, apoyados por unidades de Chetniks a cambio de suministros de armas, municiones y material. En la Batalla del Neretva, unos 20000 Chetniks lucharon junto con los alemanes y los italianos en un intento de embolsar a los Partisanos de Tito en la orilla este del Río Neretva. Pero los Partisanos se las arreglaron para romper el círculo y rodear a su vez a los Chetniks de Mihailovic, derrotándolos ampliamente y desarticulando la organización prácticamente por completo el Movimiento Chetnik en la zona occidental del RíoDrina. Los aliados deciden entonces suspender la invasión de los Balcanes y además rescinden el apoyo logístico a los Chetniks en favor de los Partisanos. En las posteriores conferencias de Teherán en 1943 y de Yalta en 1945, Stalin y Churchill deciden “dividirse” las zonas de influencia en Yugoslavia apoyando ambos a Tito.
4. Composición
Los Chetniks estaban integrados, prácticamente en su totalidad, por serbios integrados en unidades de defensa local, bandas de merodeadores, auxiliares antipartisanos, campesinos reclutados forzosamente y refugiados armados. La mayoría de ellos eran cristianos ortodoxos e incluso algunos Popes destacados como Momcilo Dujic y Savo Bozic, llegaron a desempeñar responsabilidades de Mando en alguna unidades. Unos pocos croatas, en la zona de Dalmacia central y de Primorje apoyaron al Movimiento Ravna Gora de Mihailovic, pero de una forma muy residual como para tener influencia política ó histórica. También contaban con apoyos muy reducidos entre bosnios, eslovenos, algunas comunidades judías, (que posteriormente se incorporarían a los Partisanos). Las mujeres incorporadas a las unidades Chetnik, al contrario que las partisanas, no desempeñaban roles combatientes sino que se dedicaban a las labores domésticas.
Momocilo Dujic fue además de líder religioso, Comandante Chetnik
Los musulmanes y los serbios, como ya hemos comentado, mantenían una animosidad recíproca desde tiempos remotos, y que se vio agravada por las atrocidades cometidas por los serbios contra asentamientos y poblados musulmanes en la primavera de 1941 y en los primeros meses de la invasión alemana en Bosnia y Herzegovina y otras áreas de población heterogénea ó mestiza. Además los serbios solían referirse a los musulmanes como “turcos” ó “sirvientes de la Ustacha”, por lo que muy pocos de ellos se integraron en unidades Chetnik a pesar de ser serbios de origen y de tener un cierto sentimiento nacionalista de pertenencia a la Gran Serbia. Uno de ellos fue el líder musulmán herzegovino Ismet Popovac, quien colaboró con las fuerzas de ocupación italianas integrándose en la Milicia de Voluntarios Anti-Comunistas y participando con unos 800 hombres en la Ofensiva del Río Neretva de 1943, en la que fue asesinado en circunstancias poco claras en el asalto a un poblado musulmán.
Ismet Popovac, en primer plano, fue uno de los líderes musulmanes que integraron unidades Chetnik
A partir de 1943 los Chetniks suavizaron sus políticas con vistas a facilitar la incorporación de musulmanes en sus unidades. El 25 de marzo de 1943, y en respuesta a la petición urgente del Teniente Coronel Chetnik Zaharije Ostojic, Jefe del Estado Mayor Chetnik en Herzegovina, el General Mihailovic designó a Fehim Musakadic como Comandante en Jefe de todas las tropas musulmanas de los Chetniks, esperando favorecer así la formación de nuevas unidades de este tipo en las zonas de mayoría musulmana. De esa manera, a finales de 1943, las fuerzas de origen musulmán suponían aproximadamente un 8% del total de las tropas de Mihailovic con unos 4000 hombres. Es por este motivo, entre otros, por el que otro destacado líder musulmán, Mustafá Mulalic, es designado como Vicepresidente del Comité Nacional Chetnik e enero de 1944.
El Teniente Coronel Zaharije Ostojic, fue uno de los impulsores de las unidades musulmanas de Chetniks
En noviembre de 1941, el Comandante Karlo Novak, quien había sido designado inicialmente como Jefe de Estado Mayor de los Chetniks Eslovenos, tuvo que asumir el puesto de Comandante en Jefe de los mismos ante la deserción y el paso a los Partisanos del Coronel Jakob Avsic quien había sido designado personalmente por Mihailovic. En Eslovenia, la resistencia anticomunista estaba dominada y dirigida por la Alizana Eslovena, liderada por el Partido del Pueblo Esloveno, más que por los Chetniks, y aunque teóricamente reconocían la legitimidad del Gobierno en el exilio y el Mando de Draza Mihailovic sobre todas las fuerzas yugoslavas, la realidad era que operaban con total independencia y al margen de ese mando. La Alianza Eslovena colaboró con las fuerzas italianas de ocupación, siendo integrada en unidades de la Milicia de Voluntarios Anticomunista. Como resultado de ese dominio por parte de la Alianza Eslovena, muy pocos hombres se decidieron a integrarse en las unidades Chetnik comandadas por Novak, llegando en su pico máximo a unos escasos 400 hombres. Esa escasez de fuerzas supuso su perdición en septiembre de 1943 cuando la totalidad de las fuerzas Chetniks Eslovenas fueron masacradas por los Partisanos en una batalla cerca de Ljubliana. Karlo Novak consiguió huir a Italia, donde permaneció hasta el final de la guerra, haciéndose cargo de las exiguas fuerzas eslovenas el Coronel Iván Prezelj hasta el final de la contienda.
También existían miembros de religión judía entre los Chetnik, sobre todo en los primeros meses de la invasión, (llegaron a formar la Brigada Judía Chetnik e incluso uno de ellos fue Ayudante de Campo de Mihailovic), pero a medida que los Chetniks iban estableciendo acuerdos de colaboración con las unidades alemanas e italianas, iban desertando y pasándose a los Partisanos, de tal manera que en una nota manuscrita de enero de 1943, el propio Mihailovic sostenía que “las unidades de partisanos son una pestilente colección de alimañas como la Ustacha, judíos, turcos, húngaros, y otros sedientos de la sangre del pueblo serbio”.
5. Colaboración con el EJE
Durante el desarrollo de la Guerra en Yugoslavia, las unidades Chetnik permanecieron sustancialmente “inactivas” contra las fuerzas de ocupación alemanas e italianas, incrementando paulatinamente la colaboración con estas fuerzas y viendo como disminuía poco a poco el apoyo internacional a las fuerzas Chetnik como “fuerzas de resistencia”. Después de un periodo inicial de apoyo y entendimiento con los Partisanos de Tito, los Chetniks de Mihailovic empezaron a luchar contra estos de una forma decidida y a colaborar con las fuerzas de ocupación a cambio de apoyo logístico y de suministros. De hecho, el General Mihailovic llegó a reconocer a un Coronel británico del SOE que “los principales enemigos del pueblo serbio son los Partisanos, la Ustacha, los Musulmanes, los Croatas, y finalmente los alemanes y los italianos”.
Algunos Oficiales de las misiones del SOE comenzaron a informar a Churchill de las derivas de los Chetniks
Al comienzo de la contienda y tras la invasión y rendición del estado yugoslavo a las fuerzas de ocupación, los Chetniks se niegan a aceptar esas órdenes de rendición y empiezan a sostener escaramuzas con grupos de fuerzas alemanas e italianas, lo que lleva a que incluso se llegue a poner precio a la cabeza de Draza Mihailovic. Pero los sucesivos desencuentros entre los Partisanos de Tito y los Chetniks de Mihailovic, que tenían notables diferencias en materias políticas, religiosas y étnicas, y en la idea de los Chetniks de volver al establecimiento de la Gran Serbia en lugar de la República Federal Socialista de Tito, hicieron que los Chetnik comenzaran a negociar con las tropas de ocupación y a tejer lazos de unión con el Gobierno de Salvación Nacional de Nedic. Estas negociaciones con los alemanes dieron sus frutos que cristalizaron en el apoyo prestado por las fuerzas Chetnik del Movimiento Ravna Gora de Mihailovic durante la ofensiva alemana contra la República Partisana de Uzice de Tito, en la que los Chetniks llevaron parte del peso de esa ofensiva.
Con las fuerzas italianas también hubo constantes y notables colaboraciones, por ejemplo en la anexionada Dalmacia bajo gobierno fascista italiano, en el estado títere de Montenegro, ó en la también anexionada provincia de Ljubliana en Eslovenia. Mientras que los Partisanos consideraban a todas las fuerzas de ocupación como “invasores fascistas” los Chetniks odiaban y luchaban contra la Ustacha, pero rehuían hacerlo contra los italianos e incluso mantenían un cierto acercamiento con el VI Cuerpo de Ejército Italiano, bajo Mando del General Renzo Dalmazzo, facilitado por el político serbio de Lika Stevo Radenovic. Muchos líderes Chetnik que operaban en áreas de influencia de las tropas italianas, tales como Dobroslav Jevdevic o el histórico Ilia Trifunovic, pensaban que el gobierno fascista italiano iría en detrimento del poder que tenía la Ustacha en alguna de esas zonas, por lo que eran más proclives a la alianza con las fuerzas italianas. El General Dalmazzo por su parte, pensaba en la alianza con los Chetniks como una doble alianza. Por un lado se quitaba de en medio a un enemigo que conocía el terreno y que estaba acostumbrado y dispuesto para la lucha. Por otro tendría un valioso aliado en la lucha contra los Partisanos. De esa manera se llegó a un acuerdo que se rubricó el 11 de enero de 1942, impulsado por el Capitán del Segundo Ejército italiano Angelo De Matteis y el representante de las fuerzas Chetnik en Bosnia suroriental, Mutimir Petkovic, y posteriormente rubricado por el Comandante Delegado de Mihailovic en Bosnia, el Comandante Bosko Todorovic.
Bosko Todorovic, Comandante Chetnik en Bosnia, conversando con dos Oficiales italianos
Entre los acuerdos se encontraba la provisión por parte de los italianos de armas, municiones, equipos e incluso uniformes para las unidades Chetniks, y la puesta en libertad de determinadas personas que se encontraban presas en campos como Jasenovac o Rab, a cambio de asistirse y colaborar mutuamente en la lucha contra los partisanos. En los siguientes meses de 1942, y de acuerdo a la firma del acuerdo, los Generales Mario Roatta y Vittorio Ambrosio diseñaron la estrategia de actuación en la zona de los Balcanes, que incluía evitar los acuerdos con las fuerzas de la Ustacha, promover esos mismos acuerdos con los Chetniks y eliminar a toda costa a los Partisanos. De esa manera, entre 1942 y 1943, los Chetniks que se encontraban en zonas ocupadas o bajo la influencia de las tropas de ocupación italianas, fueron organizadas y encuadradas en la Milicia Voluntaria Anticomunista, MVAC. De acuerdo a las informaciones del Coronel Giacomo Zanussi, Jefe de Estado Mayor del General Roatta, había en torno a 19000 o 20000 Chetniks encuadrados en la MVAC, solo en la zona del Estado Independiente de Croacia. Estas fuerzas Chetnik fueron equipados con rifles, granadas, morteros y piezas de artillería.
En un informe del 26 de marzo de 1943, del Estado Mayor General del Ejército Italiano, titulado “La conducta de los Chetniks”, algunos Oficiales italianos hacían notar que el control máximo de estas unidades Chetniks permanecía en manos del General de Brigada Draza Mihailovic y que podría producirse una reorientación hostil de las mismas a la luz de un cambio en la situación estratégica, dado que el Comandante en Jefe de esas tropas era Ilia Trifunovic Bircanin, quién recibía órdenes directas de Mihailovic desde la primavera de 1942.
En el momento de la rendición de las tropas italianas el 8 de septiembre de 1943, todos los destacamentos Chetnik en la zona del Estado Independiente de Croacia habían luchado en algún momento u otro contra las unidades de Partisanos de esa zona, por lo que a pesar de las indicaciones de Mihailovic de no apoyar a las tropas alemanas, (ya que Mihailovic esperaba un desembarco en Dalmacia), tuvieron que unirse a esas fuerzas alemanas que habían sustituido a los italianos en esa zona para no quedar atrapados entre los alemanes y los Partisanos.
Pavle Durisic pronuncia un discurso ante el Gobernador del Reino de Montenegro, General Pirzio Biroli
Con respecto al Estado Independiente de Croacia, se produjo un hecho muy significativo. Tras la ruptura definitiva entre los Chetniks y los Partisanos en 1941, las unidades Chetnik que operaban en territorio serbio ocupado, se vieron atrapados en la zona central, noroccidental y oriental de Bosnia entre los alemanes y la Ustacha por un lado y los Partisanos por el otro. Debido a ello iniciaron conversaciones con los alemanes, por parte del Comandante Chetnik Jezdimir Dangic, que resultaron totalmente infructuosas. Por este motivo el Comandante Dangic decidió iniciar un acuerdo con la Ustacha.
Ante Pavelic, Poglavnik del Estado Independiente de Croacia, reunido con Hitler y Göering
A pesar de estar en desacuerdo en prácticamente todos los terrenos, consiguieron encontrar un punto de acuerdo. La lucha contra los Partisanos.De esta manera, el 28 de mayo de 1942, se firma el primer acuerdo formal de colaboración entre los Chetniks bosnios y la Ustacha, en el cual los líderes Chetnik bosnios expresaban su lealtad “como ciudadanos del Estado Independiente de Croacia” al Estado y a su Poglavnik Ante Pavelic.
Chetniks, Ustachas y Domobranci, reunidos para la firma de acuerdos
Durante las siguientes tres semanas se firmaron otros tantos acuerdos, de tal manera que quedaba “cubierta” la mayor parte del territorio de Bosnia junto con los destacamentos Chetnik presentes en esa área. Como parte del cumplimiento de ese acuerdo los Chetniks se comprometían al cese de hostilidades contra las unidades de la Ustacha y la Ustacha establecía una administración en estas áreas. Los Chetniks reconocían la soberanía del Estado Independiente de Croacia y se convertían en una organización legal amparada por ese estado. También como parte del acuerdo se establecía que los Chetniks quedarían subordinados a la Ustacha en las acciones de combate contra los Partisanos y, aunque podrían emprender estas acciones por cuenta propia, deberían informar de las mismas a los Comandantes Militares de la Ustacha. A cambio los Chetniks recibían armas, municiones y apoyo logístico, los Chetniks heridos serían atendidos en hospitales croatas y sus viudas y huérfanos quedarían al cuidado de la administración croata, y las personas determinadas que fueran recomendadas por los lideres Chetniks serían liberadas de los campos de concentración bajo control de la Ustacha. Estos acuerdos se mantendrían hasta el final de la Guerra y algunos autores consideran que debido a la subordinación del Estado Independiente de Croacia y la Ustacha a la Alemania nazi, esos acuerdos eran directamente colaboración con la Alemania nazi.
Soldados Chetniks y Ustachas celebran juntos el éxito de una acción conjunta
Y con respecto a la colaboración con las fuerzas alemanas propiamente dicha podemos hacer las siguientes consideraciones. Cuando los alemanes invaden Yugoslavia se encuentran con una fuerza entrenada, motivada y acostumbrada a la guerra de guerrillas, y que bajo el mando del General Mihailovic están preparados para esperar a que se den las circunstancias propicias para alzarse contra los invasores. Esta manera de actuar, estaba muy de acuerdo e integrada en la política británica con respecto a los movimientos de resistencia para promover su clandestinidad y así evitar su destrucción prematura al enfrentarse a un enemigo que era muy superior en número. Pero los posteriores acuerdos con las fuerzas italianas, y sobre todo con la Ustacha, totalmente dependiente del gobierno nazi, hacen que por parte de las autoridades alemanas empiece a valorarse la posibilidad de establecer alianzas con los Chetniks de carácter más formal.
Soldados alemanes y Chetniks posando juntos en una zona montañosa de Yugoslavia
Así, tras la capitulación de los italianos en 1943 y el control por parte de los alemanes en esos territorios, algunas unidades Chetnik se integraron con las tropas alemanas. Así, la 114ª División de Cazadores creó en su seno un Destacamento Chetnik para favorecer su avance hacia el Adriático para recuperar los territorios que los Partisanos habían ocupado en esa área. Así esas unidades Chetniks que habían colaborado con los italianos y con la Ustacha fueron autorizados de manera oficial por el Cuartel General del XV Cuerpo de Ejército Alemán, para actuar como fuerzas auxiliares de Policía en los territorios ocupados y poder ayudarles en la lucha contra los movimientos de resistencia Partisanos a cambio de armas y apoyos. Esto creó una cierta controversia con las fuerzas de la Ustacha que siempre habían visto obstaculizada su pretensión de conformarse como una fuerza policial contra los Partisanos, debido a que los Generales alemanes habían observado un elevado número de deserciones por parte de militares croatas hacia las filas partisanas, cosa que según su opinión no ocurriría con las unidades Chetniks.
Oficiales Chetniks se coordinan con Oficiales alemanes para una acción en 1944
El Comandante de la Ustacha Mirko Blaz, de la 7ª Brigada de la Guardia Personal del Poglavnik, manifestó que “los alemanes no tienen interés en cuestiones políticas, sino que toman todo desde un punto de vista estrictamente militar. La cuestión es ocupar y mantener posiciones que están en manos de los Partisanos. Nosotros no podemos garantizarlo. Los Chetniks sí”. Los Oficiales alemanes del 2º Ejército Panzer manifestaron en numerosas ocasiones la predisposición de las unidades Chetnik para el combate y su facilidad para interactuar con las unidades alemanas, e intercedieron ante las autoridades del Estado Independiente de Croacia para que dejasen sus quejas y se dieran cuenta del valioso servicio que los Chetnik estaban haciendo al estado croata.
6. Terror y limpieza étnica
La ideología Chetnik, fuertemente enraizada en la idea de una Gran Serbia que fuera parte del Reino de Yugoslavia, promovía que esa Gran Serbia se asentase en todos aquellos territorios en los que los serbios estuvieran presentes, incluso sin ser una mayoría. Durante los años de la ocupación por parte de las fuerzas del Eje, se empezó a extender de una manera muy importante la idea de la necesidad de una limpieza étnica en esos territorios que pasarían a ser parte de la Gran Serbia. En buena parte, esa idea de la limpieza étnica sería respuesta a las matanzas de serbios por parte de la Ustacha en los territorios croatas que fueron anexionados por parte del Estado Independiente de Croacia. Aunque a decir verdad, la mayoría de las masacres perpetradas por los Chetniks fueron llevadas a cabo en la parte oriental de Bosnia, donde la Ustacha tuvo una escasa influencia.
En la época de la preguerra, e incluso en el periodo de entreguerras, el uso de tácticas de terror contra la población civil estaba a la orden del día, y se puede decir que todas las partes en conflicto habían cometido atrocidades y masacres contra los otros grupos, todos ellos en nombre de la libertad y del espacio vital de su propio pueblo. En los primeros meses de la ocupación, la Ustacha reclutó a un cierto número de musulmanes para que les ayudasen en la persecución de los serbios en su territorio, lo que provocó una escalada de violencia dentro de un ciclo de acciones y venganzas, por parte de católicos, ortodoxos, y musulmanes, percibiendo cada de ellos a los otros dos como aliados ó como enemigos, dependiendo de la presencia en los territorios que quisieran dominar.
En el caso del Estado Independiente de Croacia, la Ustacha estaba preocupada con el número de serbios que habitaban su territorio, por lo que inició una serie de actos de limpieza étnica y de terror contra los campesinos serbios de la zona croata en una escalada de acciones que se desarrollaron entre mayo y julio de 1941, y que llevaron a los alemanes a elevar sus protestas al Poglavnic Ante Pavelic para que detuviese esas matanzas. Esa oposición de los alemanes llevó a los Chetniks que habían resistido en esa zona a ejecutar su venganza, matando a cientos de croatas y musulmanes en la zona de Nevesinje.
El propio Mihailovic, en una circular enviada a sus líderes en la zona croata, el Comandante Dordije Lasic y el Capitán Pavle Durisic, les instaba entre otras cosas a la limpieza de la zona de todos los elementos “no serbios” en orden a poder implantar en esos territorios la idea de la Gran Serbia. Les conminaba a mantener la lucha e nombre de la libertad, de la patria y de Su Majestad Pedro II. A la creación de una Gran Serbia, dentro del Gran Reino de Yugoslavia, étnicamente pura, y que incluiría Serbia, Montenegro, Bosnia y Herzegovina. A luchar para incluir dentro del Reino de Yugoslavia a los territorios eslovenos que estaban en manos de los italianos y los alemanes, así como Bulgaria y el norte de Albania. A limpiar el Estado de todas las minorías nacionales y de todos los elementos extranjeros. Y, en definitiva, a barrer a los musulmanes y a los croatas de todas las poblaciones de Bosnia, Herzegovina y Sandzak.
Esta directiva de diciembre de 1941, está envuelta en la controversia ya que se sospecha que pudo ser redactada por el Capitán Durisic para su propio propósito. Existe otra nota, esta si incontrovertible, del propio Mihailovic, dirigida al Comandante en Jefe de la 2ª Brigada Chetnik de Sarajevo, en la cual manifiesta que “tiene que quedar claro para todo el mundo que, tras la guerra ó cuando se estime el momento oportuno, completaremos nuestro sagrado cometido de nadie a excepción de los serbios, pueda habitar en territorio serbio”.
En esa época, antes del invierno de 1941, los italianos ya empezaban a colaborar con los Chetniks y tras la toma por parte de las fuerzas italianas de las localidades de Visegrad, Gorazde y Foca, en el sudeste de Bosnia, decidieron pedir a las fuerzas de la Ustacha del Estado Independiente de Croacia, que se retirasen de esas ciudades para dejar a los Chetniks como fuerza de guarnición en ellas y como administradores de las mismas. Una vez que las unidades Chetniks se hicieron con el control de Gorazde, el 29 de noviembre de 1941, comenzaron una serie de juicios sumarísimos contra varios oficiales del Estado Independiente de Croacia, acusados de colaborar con los Partisanos, y que desembocó en una matanza de civiles musulmanes. 700 musulmanes fueron ejecutados y sus cuerpos colgados a la entrada de la ciudad ó arrojados al río Drina. Otros hechos similares ocurrieron en la ciudad de Foca y sus alrededores cuando, entre diciembre de 1941 y agosto de 1942, los italianos cedieron el control de las mismas a los Chetniks y estos organizaron el genocidio sistemático de unos 2000 musulmanes que habitaban esas zonas. Miles de muertos se sumaron en las ciudades de Srebrenica y Visegrad, y en una sola acción en una mañana otros trescientos musulmanes fueron ejecutados en la ciudad de Zepa a finales de 1942. Entre enero y febrero de 1943, los Chetniks montenegrinos al mando de Pavle Durisic, informaron al Estado Mayor de Mihailovic de la total destrucción de más de 50 pueblos musulmanes y de la muerte de más de 10000 musulmanes en esa área, “sin tener en cuenta edad, ni sexo”. Aunque el Estado Mayor de Mihailovic justificó estas masacres en el marco de acciones represivas contra unidades de musulmanes que les hostigaban, todo parece indicar que se llevaron a cabo en cumplimiento de la directiva de diciembre de 1941. Draza Mihailovic catalogó estas acciones como uno de los éxitos de las unidades Chetnik en el área de Sandzak.
Gitanos y musulmanes de la zona de Herzegovina son conducidos por soldados Chetnik, del Cuerpo de Voluntarios de Serbia, para ser fusilados
Las acciones contra la población croata fueron algo menores en número, pero con la misma intensidad de violencia. La masacre de Trubar ó la de Bosansko Grahovo, ambas el 27 de julio de 1941, y donde fue asesinado el sacerdote alemán Waldemar Maximilian Nestor, (primer cura católico asesinado en la Segunda Guerra Mundial), ó la matanza de judíos en Krnejusa, entre el 9 y el 10 de agosto de 1941, fueron parte de las acciones de terror de los Chetniks en el área del Estado Independiente de Croacia. En octubre de ese mismo año, unidades que estaban al mando de los líderes Chetik Petar Bacovic y Dobroslav Jevdevic y que participaban junto a los italianos en la “Operación Alfa” en el área de Prozor, (para hostigar a los Partisanos de esa zona), masacraron a cerca de 500 personas entre croatas y musulmanes y quemaron 17 pueblos. El propio Bakovic comunicó al Estado Mayor de Mihailovic que “nuestros Chetniks han eliminado a todos los hombres mayores de 15 años”. El General Mario Roatta, al mando de las operaciones, se opuso a que se repitiesen las matanzas indiscriminadas de civiles no combatientes y amenazó con retirar el apoyo de las unidades italianas a los Chetniks.
El General Mario Roatta manifestó su oposición a las matanzas perpetradas por los Chetniks
Entre 1941 y 1945, se estima que las unidades Chetniks masacraron a un número de personas cercano a las 65.000, (entre croatas y musulmanes), y destruyeron más de 300 pueblos y aldeas, un número indeterminado de iglesias, templos y lugares de oración, en lo que muchos autores consideran un verdadero genocidio sistemático y organizado.
Pero los actos de terror no se ceñían solo al terreno puramente de la limpieza étnica. En el plano ideológico, las unidades de Mihailovic persiguieron a los Partisanos con el fin de exterminarlos y también llevaron a cabo algunas acciones terroristas contra miembros del Gobierno de Salvación Nacional de MilanNedic, y contra elementos separatistas en la zona de Montenegro. Los Chetniks crearon listas de individuos que debían ser eliminados y para ello se decidió la creación de unas unidades especiales que se llamaron las “Troikas Negras”, que fueron entrenados especialmente para llevar a cabo esas acciones terroristas infiltrándose tanto en las filas del Gobierno de Nedic, como en algunas unidades de Partisanos, eliminando a todos aquellos que eran señalados y además a familiares ó simpatizantes.
7. La pérdida del apoyo aliado
Con el fin de obtener informaciones fidedignas sobre el terreno, los países aliados mandaron sucesivas misiones a los territorios ocupados de Yugoslavia. Oficiales del SOE británico y de la OSS americana, se unieron a las unidades de Chetniks y de Partisanos para comprobar cuáles eran en realidad las lealtades de cada uno de ellos.
El Teniente Coronel Mc Dowell de la OSS, lideró una misión americana de apoyo a los Chetniks. En la foto, en 1943, con Mihailovic y Popovac
En mayo de 1943, Sir William Deakin, del SOE británico, se lanzó en paracaídas sobre Montenegro en una misión de inteligencia. Deakin informó de que los Partisanos luchaban con ferocidad contra los alemanes y los italianos, conteniendo a la 1ª División de Montaña y a la 104ª División Ligera de Cazadores de la Werhmacht, pero que habían sufrido numerosas bajas y que precisaban de apoyo logístico y de armas y municiones. En la misma operación informó de que esas mismas unidades, en concreto la 1ª División de Montaña, había transitado libremente por territorio controlado por los Chetniks de Mihailovic. Además interceptó una serie de mensajes que confirmaban la actitud “tibia” de los Chetniks con respecto a las unidades alemanas.De todas formas, en septiembre de 1943, se decidió ayudar en igual medida a Chetniks y Partisanos. Pero en diciembre de 1943, la política del gobierno británico sufrió un cambio con respecto a su relación con los Chetniks, ya que estos empezaron a desobedecer las órdenes de los británicos si no recibían garantías de una invasión aliada en los Balcanes. Los británicos respondieron que tales operaciones no se llevarían a cabo hasta que no se suspendiesen las colaboraciones entre las unidades Chetniks, y los alemanes y los italianos, y empezasen a combatirlas abiertamente. La negativa de los Chetniks, (o la independencia con la que los Comandantes de Mihailovic actuaban en sus áreas de influencia), hicieron que todo el esfuerzo de ayuda se volcase hacia los Partisanos de Tito.
El Capitán William Deakin, del SOE, con Josip Broz Tito. Fue uno de los dos Oficiales británicos que estuvieron tanto con los Chetniks como con los Partisanos
Después de la Conferencia de Teherán, entre el 28 de noviembre y el 1 de diciembre de 1943, los Partisanos reciben el reconocimiento oficial por parte de los aliados como la única fuerza de resistencia de liberación nacional de Yugoslavia, y se pone en marcha la Fuerza Aérea de los Balcanes, a petición y bajo la influencia del General de Brigada Fitzroy Maclean, con el fin de poner en marcha un programa de incremento de los suministros a las unidades de Partisanos y proporcionar apoyo aéreo táctico a las acciones de combate de los Partisanos.
Además, en febrero de 1944 los Chetniks de Mihailovic fracasan en la misión de volar unos puentes que eran considerados claves sobre los ríos Morava e Ibar, permitiendo que los alemanes pudieran seguir utilizándolos. El 14 de agosto de 1944, se firma el pacto entre el Mariscal Tito y el Primer Ministro en el exilio Ivan Subasic, que llama a todas las fuerzas de resistencia contra la invasión de los alemanes a integrarse con los Partisanos de Tito. Este pacto acarrea la destitución del General Mihailovic como Comandante en Jefe del Ejército Yugoslavo y el nombramiento del Mariscal Tito en su lugar. El 6 de octubre de 1944, Milan Nedic le transfiere al General Mihailovic el Mando de la Guardia Estatal de Serbia, aunque la colaboración se prueba de todo punto imposible y la coalición se rompe en enero de 1945.
Tratando de recuperar el apoyo de los aliados, los Chetniks empiezan a dirigir sus esfuerzos a apoyar algunas operaciones de los aliados. En este punto y en el marco de la “Operación Halyard”, ayudan en el rescate de 417 aviadores americanos y aprovechan el éxito de la operación para lanzar una gran campaña de propaganda, promoviendo que “si fueran ciertas las informaciones de los Partisanos, los Chetniks se dedicarían a rescatar aviadores alemanes y a perseguir a los americanos”. Draza Mihailovic sería condecorado con la Legión de Mérito por el Presidente Harry Truman por el éxito de la “Operación Halyard”.
Dos Oficiales de la aviación estadounidense posan con guerrilleros Chetniks tras haber sido derribados sobre Yugoslavia
8. Cooperación con los Soviéticos
En septiembre de 1944, los soviéticos invaden y ocupan Rumanía y Bulgaria, colocando las fuerzas soviéticas en las fronteras de Yugoslavia. Esto no sorprendió a los Chetniks quienes durante la contienda habían dedicado parte de su esfuerzo de propaganda a transmitir el sentimiento pro-ruso y paneslavo de la mayoría de la población serbia. Resaltaban la diferencia entre el pueblo ruso y su gobierno comunista, y fomentaban la supuesta rivalidad entre los Partisanos de Tito, de ideología mayoritariamente trotskista y los soviéticos de mayoría estalinista.
El 10 de septiembre de 1944 una misión de unos 150 Chetniks, al mando del Teniente Coronel Velimir Piletic, Comandante en Jefe de la Serbia nororiental, cruzó el Danubio hacia Rumanía y estableció contacto con los soviéticos en la localidad de Craiova. Tenían como objetivo establecer un acuerdo con los soviéticos con varios puntos políticos. El cese de la guerra civil en Yugoslavia con la mediación de los soviéticos, la celebración de elecciones libres supervisadas por los aliados y la suspensión de cualquier Consejo de Guerra hasta la celebración de esas elecciones. Pero antes de que pudieran llegar a Bucarest, donde estaban establecidos los británicos y los americanos, fueron denunciados por uno de los ayudantes del Teniente Coronel Piletic como espías de los británicos y arrestados por los soviéticos el 1 de octubre de 1944.
El Teniente Coronel Velimir Piletic, lideró una misión para tratar de contactar con los soviéticos
Aunque los Chetniks pensaban que podían luchar junto a los soviéticos como aliados al mismo tiempo que combatían contra los Partisanos, en boca del propio Draza Mihailovic, “Consideramos a los rusos nuestros aliados. La lucha contra los Partisanos de Tito en Serbia, contiuará”. Los alemanes estaban atentos a los informes de su inteligencia ante los posibles giros en las alianzas de los Chetniks, y en uno de esos informes, del 19 de octubre de 1944, manifiestan que “Los Chetniks nunca han sido instruidos por DrazaMihailovic, a través de una adecuada propaganda, para enfrentarse a los soviéticos. Mihailovic sigue teniendo la ficción en su mente de que los rusos, como aliados de británicos y americanos, no lucharán contra los nacionalistas serbios que se oponen a la invasión”.
El Jefe de uno de los Grupos de Choque de Mihailovic, Teniente Coronel Keserovic, fue el primer Chetnik en colaborar activamente con los soviéticos, al enlazar sus tropas con las unidades soviéticas en la zona oriental de Serbia y ocupar juntos la ciudad de Krusevac, dejando los soviéticos al Teniente Coronel Keserovic al mando de la guarnición en la ciudad. Otro Oficial Chetnik que luchó junto a los soviéticos fue el Capitán Pedrag Rakovic, del Segundo Cuerpo de RavnaGora, quien participó en la captura de la villa de Cacak haciendo 339 prisioneros de los Cuerpos Rusos del Ejército Alemán. Las colaboraciones de los soviéticos con Keserovic y Rakovic, provocaron las protestas de Tito ante el Mariscal Fyodor Tolbukhin, Comandante en Jefe del Frente Yugoslavo, lo que hizo que se suspendieran estas y otras colaboraciones futuras con los Chetniks. Esto hizo que los Chetniks, con el fin de evitar su desarme y su incorporación a los Partisanos de Tito, se retirasen a las montañas y tras la caída de Belgrado en manos de Partisanos y soviéticos, albergasen unas esperanzas casi nulas de poder sobrevivir legítimamente en el futuro Estado de Yugoslavia.
El Mariscal Fyodor Tolbukhin acabó con la colaboración entre rusos y Chetniks por las presiones de Tito
9. Retirada y disolución
Finalmente entre abril y mayo de 1945, mientras los Partisanos victoriosos tomaban posesión de los territorios de Yugoslavia, la mayoría de los Chetniks se retiraban hacia Italia o Austria tratando de escapar de las fuerzas partisanas de Tito. Muchos fueron capturados por los Partisanos en su intento de huir y otros devueltos a territorio yugoslavo por los británicos. Muchos fueron ejecutados sumariamente, sobre todo en los primeros meses desde el fin de la guerra, y otros fueron juzgados por traición y condenados a penas de prisión ó a la pena de muerte. Mihailovic y unos cientos de sus incondicionales trataron de hacerse fuertes en Ravna Gora, pero finalmente se rindieron a los Partisanos y fueron llevados ante la Justicia.
El 13 de marzo de 1946, Draza Mihailovic es detenido por agentes de la OZNA,(el servicio secreto yugoslavo), tras caer en una trampa propiciada por el que había sido uno de sus hombres de confianza, el Comandante Nikola Kalabic que moriría asesinado días después , y conducido a Belgrado para enfrentarse a 47 cargos de alta traición al Estado y crímenes de guerra. Encontrado culpable de todos los cargos, fue fusilado el 17 julio de 1946 junto con otros líderes Chetniks y altos cargos del Gobierno de Salvación Nacional.
El General Draza Mihailovic, detenido y conducido a juicio. Sería fusilado meses después convicto de alta traición y crímenes de guerra
Con el fusilamiento de Draza Mihailovic, el Mariscal Tito, que en esa época era ya Primer Ministro de la República Federal Socialista de Yugoslavia tras el derrocamiento del Rey Pedro II el 29 de noviembre de 1945, decreta una amnistía para todos aquellos miembros de las unidades Chetniks que todavía no hubieran sido capturados y que se entregasen voluntariamente. El Movimiento Chetnik quedaba oficialmente proscrito en Yugoslavia.
Los Destacamentos Chetnik del Ejército de Yugoslavia, comúnmente conocidos como los Chetniks, fue un movimiento guerrillero en la antigua Yugoslavia que estuvo liderado por el General Draza Mihailovic, que se alzó contra la ocupación de las fuerzas del Eje como objetivo a largo plazo, aunque también llegó a colaborar con las fuerzas de ocupación por periodos limitados y en cuestiones tácticas.
El General Draza Mihailovic, fue el líder máximo de todas las Unidades ChetnikLas relaciones de colaboración entre Chetniks y alemanes fueron fluidas y de colaboración en la mayoría de ocasionesLas tensiones étnicas existían desde hacía muchísimos años en los diferentes territorios del Reino de Yugoslavia. Por eso los Chetniks, en particular Draza Mihailovic tal y como expone en su Directiva del 20 de 1941, entienden estas acciones contra croatas y bosnios, como parte de la guerra para conseguir el objetivo de la Gran Serbia y conseguir así “despejar” esos territorios de la población que no fuera serbia. La lucha contra los partisanos, en cambio, se mantenía en un plano puramente ideológico y las acciones contra los musulmanes se enraizaban en los ancestrales conflictos entre ambas etnias de carácter religioso.
2. Orígenes
Aunque más tarde la organización se renombró como Ejército del Territorio de Yugoslavia, el nombre que se siguió utilizando fue el popular Chetniks. La palabra Chetnik se utilizaba para describir a los miembros de la Guerrilla Balcánica Cheta, compuesta por cristianos ortodoxos serbios y búlgaros, que lucharon contra los turcos del Imperio Otomano a principios del siglo XX en las guerras balcánicas. Es una palabra eslava, cheta, que significa “grupo organizado o banda”, y que a su vez deriva de otra turca “cete” tomada a su vez del sánscrito “cakra” y que significa “grupo de soldados”. El sufijo “nik”, de origen eslavo, significa a su vez, “el que tiene relación con algo”. Por lo tanto un Chetnik, sería aquella persona que tiene relación ó se encuentra encuadrada en un grupo organizado o banda.
Aunque el movimiento Chetnik tiene su raíces en el siglo XIX en los movimientos de resistencia contra los turcos en Serbia, la primera organización operativa de la que se tiene conocimiento data del año 1903, cuando el ejército serbio crea e implementa un programa para la instrucción de los individuos y poder así desarrollar una estrategia de guerra de guerrillas y acciones terroristas en Macedonia contra los turcos. En esta organización primigenia, ya figuraban guerrilleros como Ilia Trifunovic Bircanin o Kosta Pecanac, quién se encontraba al frente de la organización Chetnik, (Asociación Chetnik por la Libertad, el Honor y la Madre Patria), en abril de 1941 al inicio de la invasión alemana. La organización Chetnik combatió en las dos guerras balcánicas, (entre 1912 y 1913, contra turcos y búlgaros), y en la Primera Guerra Mundial, manteniéndose activos también durante el periodo de entreguerras.
Veteranos Chetniks desfilando por las calles de Belgrado en 1920Kosta Pecanac, líder Chetnik desde las Guerras Balcánicas, estaba al frente de la mayor organización Chetnik en 1941 y además tenía lazos con la ultraderecha yugoslava3. La Segunda Guerra Mundial
En Abril de 1941 tropas alemanas, italianas y húngaras, invaden Yugoslavia llevando al colapso al estado Yugoslavo, forzando el exilio a Inglaterra del Rey Pedro II y provocando la rendición del ejército yugoslavo. Varios destacamentos serbios se negaron a acatar las órdenes de rendición y se desplazaron a zonas montañosas para iniciar un movimiento de resistencia contra la invasión, de tal manera que el movimiento de resistencia Chetnik es anterior a los Partisanos de Tito.
Pecanac llegó pronto a una serie de acuerdos con el Gobierno de Salvación Nacional de Nedic, en el Territorio del Comandante Militar de Serbia que en esa época era Helmuth Förster.
Kosta Pecanac paseando del brazo de un Oficial alemán en ocubre de 1941Ilia Trifunovic Bircanin, también era otro destacado líder Chetnik. Aquí le vemos en 1942 dirigiéndose a una de las facciones bajo su controlPara el verano de 1941, el “Movimiento Ravna Gora” ya había atraído hacia sí a un cierto número de intelectuales y de políticos serbios, como Stevan Moljevic, que empezaban a desarrollar una ideología propia, tanto para el Movimiento como para la futura Gran Serbia, instando a las fuerzas Chetniks a no cometer los errores de la Primera Guerra Mundial y que reclamasen los territorios históricos de Serbia que según Moljevic abarcaban entre un 65% y un 70% del Reino de Yugoslavia. Además empezaban a propugnar la relocalización en otros territorios de la población que no fuera serbia de origen. Mihalovic designó en Agosto de 1941 a Moljevic como líder del Comité Nacional Central del Movimiento Ravna Gora, de tal manera que sus propuestas fueron trasladadas al Comité Chetnik de Belgrado y más tarde, en Septiembre de 1941, al Gobierno en el exilio del Rey Pedro II, detallando ya de forma específica los intercambios de población entre los diferentes territorios del Reino de Yugoslavia.
El Rey Pedro II, desde el exilio en Londres, estaba puntualmente informado de las bases políticas del Movimiento Ravna Gora. En la foto aparece con el General Montgomery y con Winston ChurchillEn el otoño de 1942 otro documento es presentado en la Conferencia de Jóvenes Intelectuales Chetniks en Montenegro, y propone además que la futura Yugoslavia unificada estuviera únicamente compuesta por serbios, croatas y eslovenos, con la exclusión de otros grupos étnicos, que sería controlada por las fuerzas Chetniks con el respaldo del Rey, además de reformas políticas y agrarias, nacionalización de la banca y el comercio, y promoción de la ideología Chetnik como la fundamental del Estado. A pesar de la ausencia de Mihailovic, se daba por supuesta su adhesión al documento, ya que envió a la conferencia a tres de sus principales lugartenientes en el Destacamento Chetnik de Lim-Sandzak, (el mayor y más elitista en esa época), tales como Ostojic, Lasic y Durisic, siendo este último uno de los que desempeñó un papel predominante en la conferencia.
Pavle Durisic, Comandante Chetnik en la zona de SandzakAl principio de la Guerra algunos líderes Chetnik llevaron a cabo varias operaciones contra las fuerzas del Eje en coordinación y colaboración con los Partisanos de Tito. El 19 de septiembre de 1941, Tito y Mihailovic se reúnen por primera vez en la localidad de Struganik. En esa reunión Tito le ofrece a Mihailovic convertirse en su Jefe de Estado Mayor a cambio de integrar las unidades Chetniks con sus Partisanos. Mihailovic era reacio a atacar abiertamente a los alemanes, ya que temía las represalias contra la población civil, (por cada soldado alemán muerto 100 civiles serían fusilados. Por cada soldado alemán muerto, 50 civiles serían fusilados), por lo que rechazó el ofrecimiento de Tito, aunque prometió no atacar ni hostigar a los Partisanos. El 26 de octubre de 1941, Tito propone a Mihailovic un nuevo acuerdo basado en doce puntos tales como el establecimiento de un Cuartel General conjunto de Partisanos y Chetniks, acciones militares conjuntas contra los alemanes y otras unidades colaboracionistas o de ocupación, la creación de un Estado Mayor Conjunto para temas de abastecimiento y suministros, y la formación de Comités de Liberación Nacional. Mihailovic volvió a rechazar la propuesta y empezó a pensar que al mismo nivel que los alemanes, los Partisanos de Tito empezaban a ser sus enemigos.
Soldados Chetniks golpean con palos a un Partisano capturadoDurante ese mes, y a instancias del Gobierno en el exilio, los británicos insistieron varias veces a Tito para que nombrase a Mihailovic como Comandante en Jefe de todas las fuerzas de resistencia, siendo tal petición rechazada por Tito. Además se produjeron varias violaciones de la tregua por parte de los Chetniks, a instancias del Estado Mayor de Mihailovic, como la ejecución de un Comandante Partisano ó la masacre de unos 30 civiles acusados de colaborar con los Partisanos, (la mayoría eran niños y heridos). A pesar de ello, los Chetniks y los Partisanos siguieron llevando a cabo acciones conjuntas puntuales en la zona oriental de Bosnia.
En diciembre de 1941, el Gobierno en el exilio en Londres decide el ascenso de Draza Mihailovic a General de Brigada y le designa como Comandante en Jefe del Ejército Nacional de Yugoslavia. Para esa época Mihailovic había empezado a establecer lazos con el Gobierno de Salvación Nacional de Milan Nedic y con los alemanes, a cambio de que le proporcionaran armamento para poder luchar contra los Partisanos de Tito. Estas conversaciones se vieron frustradas por el convencimiento del General Franz Böhme, Comandante General Plenipotenciario en los Balcanes, quien creía que podían combatir a los Partisanos con sus propios medios y que además le exigió a Mihailovic su rendición incondicional. Los alemanes lanzaron una ofensiva contra los Chetniks de Mihailovic en Ravna Gora, quienes se vieron obligados a retirarse del Territorio del Comandante Militar de Serbia, desplazando el núcleo de sus tropas y el escenario de sus operaciones al Estado Independiente de Croacia, (títere de los nazis), gobernado por Ante Pavelic.
El General Franz Böhme rechazó la oferta del General Mihailovic para luchar contra los Partisanos de TitoEl Coronel Bailey del SOE británico posando con el Comandante Lukacevic del Movimiento Ravna Gora4. Composición
Los Chetniks estaban integrados, prácticamente en su totalidad, por serbios integrados en unidades de defensa local, bandas de merodeadores, auxiliares antipartisanos, campesinos reclutados forzosamente y refugiados armados. La mayoría de ellos eran cristianos ortodoxos e incluso algunos Popes destacados como Momcilo Dujic y Savo Bozic, llegaron a desempeñar responsabilidades de Mando en alguna unidades. Unos pocos croatas, en la zona de Dalmacia central y de Primorje apoyaron al Movimiento Ravna Gora de Mihailovic, pero de una forma muy residual como para tener influencia política ó histórica. También contaban con apoyos muy reducidos entre bosnios, eslovenos, algunas comunidades judías, (que posteriormente se incorporarían a los Partisanos). Las mujeres incorporadas a las unidades Chetnik, al contrario que las partisanas, no desempeñaban roles combatientes sino que se dedicaban a las labores domésticas.
Momocilo Dujic fue además de líder religioso, Comandante ChetnikIsmet Popovac, en primer plano, fue uno de los líderes musulmanes que integraron unidades ChetnikEl Teniente Coronel Zaharije Ostojic, fue uno de los impulsores de las unidades musulmanas de ChetniksTambién existían miembros de religión judía entre los Chetnik, sobre todo en los primeros meses de la invasión, (llegaron a formar la Brigada Judía Chetnik e incluso uno de ellos fue Ayudante de Campo de Mihailovic), pero a medida que los Chetniks iban estableciendo acuerdos de colaboración con las unidades alemanas e italianas, iban desertando y pasándose a los Partisanos, de tal manera que en una nota manuscrita de enero de 1943, el propio Mihailovic sostenía que “las unidades de partisanos son una pestilente colección de alimañas como la Ustacha, judíos, turcos, húngaros, y otros sedientos de la sangre del pueblo serbio”.
5. Colaboración con el EJE
Durante el desarrollo de la Guerra en Yugoslavia, las unidades Chetnik permanecieron sustancialmente “inactivas” contra las fuerzas de ocupación alemanas e italianas, incrementando paulatinamente la colaboración con estas fuerzas y viendo como disminuía poco a poco el apoyo internacional a las fuerzas Chetnik como “fuerzas de resistencia”. Después de un periodo inicial de apoyo y entendimiento con los Partisanos de Tito, los Chetniks de Mihailovic empezaron a luchar contra estos de una forma decidida y a colaborar con las fuerzas de ocupación a cambio de apoyo logístico y de suministros. De hecho, el General Mihailovic llegó a reconocer a un Coronel británico del SOE que “los principales enemigos del pueblo serbio son los Partisanos, la Ustacha, los Musulmanes, los Croatas, y finalmente los alemanes y los italianos”.
Algunos Oficiales de las misiones del SOE comenzaron a informar a Churchill de las derivas de los ChetniksCon las fuerzas italianas también hubo constantes y notables colaboraciones, por ejemplo en la anexionada Dalmacia bajo gobierno fascista italiano, en el estado títere de Montenegro, ó en la también anexionada provincia de Ljubliana en Eslovenia. Mientras que los Partisanos consideraban a todas las fuerzas de ocupación como “invasores fascistas” los Chetniks odiaban y luchaban contra la Ustacha, pero rehuían hacerlo contra los italianos e incluso mantenían un cierto acercamiento con el VI Cuerpo de Ejército Italiano, bajo Mando del General Renzo Dalmazzo, facilitado por el político serbio de Lika Stevo Radenovic. Muchos líderes Chetnik que operaban en áreas de influencia de las tropas italianas, tales como Dobroslav Jevdevic o el histórico Ilia Trifunovic, pensaban que el gobierno fascista italiano iría en detrimento del poder que tenía la Ustacha en alguna de esas zonas, por lo que eran más proclives a la alianza con las fuerzas italianas. El General Dalmazzo por su parte, pensaba en la alianza con los Chetniks como una doble alianza. Por un lado se quitaba de en medio a un enemigo que conocía el terreno y que estaba acostumbrado y dispuesto para la lucha. Por otro tendría un valioso aliado en la lucha contra los Partisanos. De esa manera se llegó a un acuerdo que se rubricó el 11 de enero de 1942, impulsado por el Capitán del Segundo Ejército italiano Angelo De Matteis y el representante de las fuerzas Chetnik en Bosnia suroriental, Mutimir Petkovic, y posteriormente rubricado por el Comandante Delegado de Mihailovic en Bosnia, el Comandante Bosko Todorovic.
Bosko Todorovic, Comandante Chetnik en Bosnia, conversando con dos Oficiales italianosEn un informe del 26 de marzo de 1943, del Estado Mayor General del Ejército Italiano, titulado “La conducta de los Chetniks”, algunos Oficiales italianos hacían notar que el control máximo de estas unidades Chetniks permanecía en manos del General de Brigada Draza Mihailovic y que podría producirse una reorientación hostil de las mismas a la luz de un cambio en la situación estratégica, dado que el Comandante en Jefe de esas tropas era Ilia Trifunovic Bircanin, quién recibía órdenes directas de Mihailovic desde la primavera de 1942.
En el momento de la rendición de las tropas italianas el 8 de septiembre de 1943, todos los destacamentos Chetnik en la zona del Estado Independiente de Croacia habían luchado en algún momento u otro contra las unidades de Partisanos de esa zona, por lo que a pesar de las indicaciones de Mihailovic de no apoyar a las tropas alemanas, (ya que Mihailovic esperaba un desembarco en Dalmacia), tuvieron que unirse a esas fuerzas alemanas que habían sustituido a los italianos en esa zona para no quedar atrapados entre los alemanes y los Partisanos.
Pavle Durisic pronuncia un discurso ante el Gobernador del Reino de Montenegro, General Pirzio BiroliAnte Pavelic, Poglavnik del Estado Independiente de Croacia, reunido con Hitler y GöeringChetniks, Ustachas y Domobranci, reunidos para la firma de acuerdosSoldados Chetniks y Ustachas celebran juntos el éxito de una acción conjuntaSoldados alemanes y Chetniks posando juntos en una zona montañosa de YugoslaviaOficiales Chetniks se coordinan con Oficiales alemanes para una acción en 19446. Terror y limpieza étnica
La ideología Chetnik, fuertemente enraizada en la idea de una Gran Serbia que fuera parte del Reino de Yugoslavia, promovía que esa Gran Serbia se asentase en todos aquellos territorios en los que los serbios estuvieran presentes, incluso sin ser una mayoría. Durante los años de la ocupación por parte de las fuerzas del Eje, se empezó a extender de una manera muy importante la idea de la necesidad de una limpieza étnica en esos territorios que pasarían a ser parte de la Gran Serbia. En buena parte, esa idea de la limpieza étnica sería respuesta a las matanzas de serbios por parte de la Ustacha en los territorios croatas que fueron anexionados por parte del Estado Independiente de Croacia. Aunque a decir verdad, la mayoría de las masacres perpetradas por los Chetniks fueron llevadas a cabo en la parte oriental de Bosnia, donde la Ustacha tuvo una escasa influencia.
En la época de la preguerra, e incluso en el periodo de entreguerras, el uso de tácticas de terror contra la población civil estaba a la orden del día, y se puede decir que todas las partes en conflicto habían cometido atrocidades y masacres contra los otros grupos, todos ellos en nombre de la libertad y del espacio vital de su propio pueblo. En los primeros meses de la ocupación, la Ustacha reclutó a un cierto número de musulmanes para que les ayudasen en la persecución de los serbios en su territorio, lo que provocó una escalada de violencia dentro de un ciclo de acciones y venganzas, por parte de católicos, ortodoxos, y musulmanes, percibiendo cada de ellos a los otros dos como aliados ó como enemigos, dependiendo de la presencia en los territorios que quisieran dominar.
En el caso del Estado Independiente de Croacia, la Ustacha estaba preocupada con el número de serbios que habitaban su territorio, por lo que inició una serie de actos de limpieza étnica y de terror contra los campesinos serbios de la zona croata en una escalada de acciones que se desarrollaron entre mayo y julio de 1941, y que llevaron a los alemanes a elevar sus protestas al Poglavnic Ante Pavelic para que detuviese esas matanzas. Esa oposición de los alemanes llevó a los Chetniks que habían resistido en esa zona a ejecutar su venganza, matando a cientos de croatas y musulmanes en la zona de Nevesinje.
El propio Mihailovic, en una circular enviada a sus líderes en la zona croata, el Comandante Dordije Lasic y el Capitán Pavle Durisic, les instaba entre otras cosas a la limpieza de la zona de todos los elementos “no serbios” en orden a poder implantar en esos territorios la idea de la Gran Serbia. Les conminaba a mantener la lucha e nombre de la libertad, de la patria y de Su Majestad Pedro II. A la creación de una Gran Serbia, dentro del Gran Reino de Yugoslavia, étnicamente pura, y que incluiría Serbia, Montenegro, Bosnia y Herzegovina. A luchar para incluir dentro del Reino de Yugoslavia a los territorios eslovenos que estaban en manos de los italianos y los alemanes, así como Bulgaria y el norte de Albania. A limpiar el Estado de todas las minorías nacionales y de todos los elementos extranjeros. Y, en definitiva, a barrer a los musulmanes y a los croatas de todas las poblaciones de Bosnia, Herzegovina y Sandzak.
Esta directiva de diciembre de 1941, está envuelta en la controversia ya que se sospecha que pudo ser redactada por el Capitán Durisic para su propio propósito. Existe otra nota, esta si incontrovertible, del propio Mihailovic, dirigida al Comandante en Jefe de la 2ª Brigada Chetnik de Sarajevo, en la cual manifiesta que “tiene que quedar claro para todo el mundo que, tras la guerra ó cuando se estime el momento oportuno, completaremos nuestro sagrado cometido de nadie a excepción de los serbios, pueda habitar en territorio serbio”.
En esa época, antes del invierno de 1941, los italianos ya empezaban a colaborar con los Chetniks y tras la toma por parte de las fuerzas italianas de las localidades de Visegrad, Gorazde y Foca, en el sudeste de Bosnia, decidieron pedir a las fuerzas de la Ustacha del Estado Independiente de Croacia, que se retirasen de esas ciudades para dejar a los Chetniks como fuerza de guarnición en ellas y como administradores de las mismas. Una vez que las unidades Chetniks se hicieron con el control de Gorazde, el 29 de noviembre de 1941, comenzaron una serie de juicios sumarísimos contra varios oficiales del Estado Independiente de Croacia, acusados de colaborar con los Partisanos, y que desembocó en una matanza de civiles musulmanes. 700 musulmanes fueron ejecutados y sus cuerpos colgados a la entrada de la ciudad ó arrojados al río Drina. Otros hechos similares ocurrieron en la ciudad de Foca y sus alrededores cuando, entre diciembre de 1941 y agosto de 1942, los italianos cedieron el control de las mismas a los Chetniks y estos organizaron el genocidio sistemático de unos 2000 musulmanes que habitaban esas zonas. Miles de muertos se sumaron en las ciudades de Srebrenica y Visegrad, y en una sola acción en una mañana otros trescientos musulmanes fueron ejecutados en la ciudad de Zepa a finales de 1942. Entre enero y febrero de 1943, los Chetniks montenegrinos al mando de Pavle Durisic, informaron al Estado Mayor de Mihailovic de la total destrucción de más de 50 pueblos musulmanes y de la muerte de más de 10000 musulmanes en esa área, “sin tener en cuenta edad, ni sexo”. Aunque el Estado Mayor de Mihailovic justificó estas masacres en el marco de acciones represivas contra unidades de musulmanes que les hostigaban, todo parece indicar que se llevaron a cabo en cumplimiento de la directiva de diciembre de 1941. Draza Mihailovic catalogó estas acciones como uno de los éxitos de las unidades Chetnik en el área de Sandzak.
Gitanos y musulmanes de la zona de Herzegovina son conducidos por soldados Chetnik, del Cuerpo de Voluntarios de Serbia, para ser fusiladosEl General Mario Roatta manifestó su oposición a las matanzas perpetradas por los ChetniksPero los actos de terror no se ceñían solo al terreno puramente de la limpieza étnica. En el plano ideológico, las unidades de Mihailovic persiguieron a los Partisanos con el fin de exterminarlos y también llevaron a cabo algunas acciones terroristas contra miembros del Gobierno de Salvación Nacional de MilanNedic, y contra elementos separatistas en la zona de Montenegro. Los Chetniks crearon listas de individuos que debían ser eliminados y para ello se decidió la creación de unas unidades especiales que se llamaron las “Troikas Negras”, que fueron entrenados especialmente para llevar a cabo esas acciones terroristas infiltrándose tanto en las filas del Gobierno de Nedic, como en algunas unidades de Partisanos, eliminando a todos aquellos que eran señalados y además a familiares ó simpatizantes.
7. La pérdida del apoyo aliado
Con el fin de obtener informaciones fidedignas sobre el terreno, los países aliados mandaron sucesivas misiones a los territorios ocupados de Yugoslavia. Oficiales del SOE británico y de la OSS americana, se unieron a las unidades de Chetniks y de Partisanos para comprobar cuáles eran en realidad las lealtades de cada uno de ellos.
El Teniente Coronel Mc Dowell de la OSS, lideró una misión americana de apoyo a los Chetniks. En la foto, en 1943, con Mihailovic y PopovacEl Capitán William Deakin, del SOE, con Josip Broz Tito. Fue uno de los dos Oficiales británicos que estuvieron tanto con los Chetniks como con los PartisanosAdemás, en febrero de 1944 los Chetniks de Mihailovic fracasan en la misión de volar unos puentes que eran considerados claves sobre los ríos Morava e Ibar, permitiendo que los alemanes pudieran seguir utilizándolos. El 14 de agosto de 1944, se firma el pacto entre el Mariscal Tito y el Primer Ministro en el exilio Ivan Subasic, que llama a todas las fuerzas de resistencia contra la invasión de los alemanes a integrarse con los Partisanos de Tito. Este pacto acarrea la destitución del General Mihailovic como Comandante en Jefe del Ejército Yugoslavo y el nombramiento del Mariscal Tito en su lugar. El 6 de octubre de 1944, Milan Nedic le transfiere al General Mihailovic el Mando de la Guardia Estatal de Serbia, aunque la colaboración se prueba de todo punto imposible y la coalición se rompe en enero de 1945.
Tratando de recuperar el apoyo de los aliados, los Chetniks empiezan a dirigir sus esfuerzos a apoyar algunas operaciones de los aliados. En este punto y en el marco de la “Operación Halyard”, ayudan en el rescate de 417 aviadores americanos y aprovechan el éxito de la operación para lanzar una gran campaña de propaganda, promoviendo que “si fueran ciertas las informaciones de los Partisanos, los Chetniks se dedicarían a rescatar aviadores alemanes y a perseguir a los americanos”. Draza Mihailovic sería condecorado con la Legión de Mérito por el Presidente Harry Truman por el éxito de la “Operación Halyard”.
Dos Oficiales de la aviación estadounidense posan con guerrilleros Chetniks tras haber sido derribados sobre Yugoslavia8. Cooperación con los Soviéticos
En septiembre de 1944, los soviéticos invaden y ocupan Rumanía y Bulgaria, colocando las fuerzas soviéticas en las fronteras de Yugoslavia. Esto no sorprendió a los Chetniks quienes durante la contienda habían dedicado parte de su esfuerzo de propaganda a transmitir el sentimiento pro-ruso y paneslavo de la mayoría de la población serbia. Resaltaban la diferencia entre el pueblo ruso y su gobierno comunista, y fomentaban la supuesta rivalidad entre los Partisanos de Tito, de ideología mayoritariamente trotskista y los soviéticos de mayoría estalinista.
El 10 de septiembre de 1944 una misión de unos 150 Chetniks, al mando del Teniente Coronel Velimir Piletic, Comandante en Jefe de la Serbia nororiental, cruzó el Danubio hacia Rumanía y estableció contacto con los soviéticos en la localidad de Craiova. Tenían como objetivo establecer un acuerdo con los soviéticos con varios puntos políticos. El cese de la guerra civil en Yugoslavia con la mediación de los soviéticos, la celebración de elecciones libres supervisadas por los aliados y la suspensión de cualquier Consejo de Guerra hasta la celebración de esas elecciones. Pero antes de que pudieran llegar a Bucarest, donde estaban establecidos los británicos y los americanos, fueron denunciados por uno de los ayudantes del Teniente Coronel Piletic como espías de los británicos y arrestados por los soviéticos el 1 de octubre de 1944.
El Teniente Coronel Velimir Piletic, lideró una misión para tratar de contactar con los soviéticosEl Jefe de uno de los Grupos de Choque de Mihailovic, Teniente Coronel Keserovic, fue el primer Chetnik en colaborar activamente con los soviéticos, al enlazar sus tropas con las unidades soviéticas en la zona oriental de Serbia y ocupar juntos la ciudad de Krusevac, dejando los soviéticos al Teniente Coronel Keserovic al mando de la guarnición en la ciudad. Otro Oficial Chetnik que luchó junto a los soviéticos fue el Capitán Pedrag Rakovic, del Segundo Cuerpo de RavnaGora, quien participó en la captura de la villa de Cacak haciendo 339 prisioneros de los Cuerpos Rusos del Ejército Alemán. Las colaboraciones de los soviéticos con Keserovic y Rakovic, provocaron las protestas de Tito ante el Mariscal Fyodor Tolbukhin, Comandante en Jefe del Frente Yugoslavo, lo que hizo que se suspendieran estas y otras colaboraciones futuras con los Chetniks. Esto hizo que los Chetniks, con el fin de evitar su desarme y su incorporación a los Partisanos de Tito, se retirasen a las montañas y tras la caída de Belgrado en manos de Partisanos y soviéticos, albergasen unas esperanzas casi nulas de poder sobrevivir legítimamente en el futuro Estado de Yugoslavia.
El Mariscal Fyodor Tolbukhin acabó con la colaboración entre rusos y Chetniks por las presiones de Tito9. Retirada y disolución
Finalmente entre abril y mayo de 1945, mientras los Partisanos victoriosos tomaban posesión de los territorios de Yugoslavia, la mayoría de los Chetniks se retiraban hacia Italia o Austria tratando de escapar de las fuerzas partisanas de Tito. Muchos fueron capturados por los Partisanos en su intento de huir y otros devueltos a territorio yugoslavo por los británicos. Muchos fueron ejecutados sumariamente, sobre todo en los primeros meses desde el fin de la guerra, y otros fueron juzgados por traición y condenados a penas de prisión ó a la pena de muerte. Mihailovic y unos cientos de sus incondicionales trataron de hacerse fuertes en Ravna Gora, pero finalmente se rindieron a los Partisanos y fueron llevados ante la Justicia.
El 13 de marzo de 1946, Draza Mihailovic es detenido por agentes de la OZNA,(el servicio secreto yugoslavo), tras caer en una trampa propiciada por el que había sido uno de sus hombres de confianza, el Comandante Nikola Kalabic que moriría asesinado días después , y conducido a Belgrado para enfrentarse a 47 cargos de alta traición al Estado y crímenes de guerra. Encontrado culpable de todos los cargos, fue fusilado el 17 julio de 1946 junto con otros líderes Chetniks y altos cargos del Gobierno de Salvación Nacional.
El General Draza Mihailovic, detenido y conducido a juicio. Sería fusilado meses después convicto de alta traición y crímenes de guerra10. Galería de imágenes
El General Mihailovic gozaba de un gran apoyo entre la población civil y entre los líderes locales
El General Mihailovic fue Jefe del Ejército Nacional de Yugoslavia y recibió apoyo de varias misiones aliadas
Los Chetniks de Mihailovic eran recibidos en muchas aldeas y agasajados con ceremonias religiosas por parte de los Clérigos locales
También hubo musulmanes entre los Chetniks
Soldados Chetniks de la División Dinara en 1943
Muy pocas mujeres Chetniks se integraron en las unidades como combatientes
El Capitán Pedrag Rakovic fue uno de los pocos en colaborar en acciones con las tropas soviéticas
El Comandante Slobodan Jevdevic conversando con varios Oficiales italianos durante la ofensiva sobre Prozor
Los Comandantes Nikola Kalabic y Dragoslav Racic, junto con Nesko Nedic, (hijo del Primer Ministro), posan con un Oficial alemán al fondo
El Comandante Momocilo Dujic con un Oficial italiano
Kosta Musicki, del Cuerpo de Voluntarios Serbios, se integró en los Chetniks después de que los alemanes pusieran precio a la cabeza de Mihailovic. Fue juzgado y fusilado junto a él
Oficiales Partisanos se fotografían junto a Mihailovic tras su detención
Dimitrije Ljotic mandaba su propia facción de Chetniks que se convertiría más tarde en el Cuerpo de Voluntarios Serbios
Dobroslav Jevdevic luciendo la Orden de la Estrella de Karadorde, la más alta condecoración serbia
El Comandante Petar Bakovic se dirige a sus Chetniks en una arenga previa al combate
El General Mihailovic conversando con un Oficial británico y otro estadounidense, miembros de una de las múltiples misiones que se desarrollaron por parte del SOE y de la OSS en territorio Chetnik
El Comandante Nikola Kalabic, el presunto traidor a Mihailovic a cambio de inmunidad
Soldados Chetniks con ametralladoras capturadas a los alemaneshttp://www.ravnagorachetniks.org/
https://en.wikipedia.org/wiki/Dra%C5%BE ... lovi%C4%87
https://en.wikipedia.org/wiki/Chetniks
http://kingdom-of-yugoslavia-in-ww2.com/en/
http://www.generalmihailovich.com/
